MADRID, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del RCD Espanyol, Miguel Angel Lotina, afronta mañana, en Madrid contra el Zaragoza, por primera vez en su carrera profesional una final de Copa del Rey, que se toma como "algo más que un partido normal" y que considera es un encuentro "para gozar".
"Cuando veamos a toda la gente se nos empezará a remover el estómago, pero hasta entonces estoy muy relajado y tranquilo. Para mí, estar aquí es una fiesta. Es un partido para gozar y difrutar, y si perdemos, lo sufriré por mis jugadores y por mi afición", comentó.
"Prefiero estar aquí y perder. Luego ya pensaremos en volver el año que viene, aunque suponga una desilusión para la afición. Pero sólo pensamos en ganar", dijo Lotina, consciente de "lo que significa que vengan más de 26.000 aficionados gastándose un dineral".
El técnico vasco dijo "saber lo que se siente" y rememoró su experiencia como aficionado en una final de Copa perdida por el Athletic de Bilbao ante el Betis en 1977, cuando él tenía 20 años, para subrayar la importancia de una final para los aficionados.
"Vine a ver al Athletic, compré la entrada más barata porque no tenía dinero y allí estuve en el gallinero del Calderón. Sé lo que se siente cuando se pierde y que una final de Copa es algo más que un partido normal", comentó el de Meñaka en rueda de prensa.
"YA ME GUSTARIA IR DE FAVORITO".
"Sé lo que es venir a una final de favorito y volverte a casa llorando", añadió. Ahora, sin embargo, cree que la condición de favorito corresponde al Zaragoza. "Ya me gustaría ir de favorito, porque eso significaría que estamos mejor, pero no es el caso", dijo.
"Si esta final se hubiese jugado el año pasado, seguramente seríamos nosotros los favoritos porque así lo decía la clasificación de la Liga. Pero este año es el Zaragoza por la clasificación y por haber eliminado al Barcelona, el Real Madrid y el Atlético".
Lotina destacó que "hay muy poquitos equipos en España capaces de eliminar a estos tres equipos". Con todo, reivindicó las opciones del Espanyol y recordó que el zaragoza ganó su última Copa, ante el Real Madrid en 2004, cuando era el rival el que "iba de favorito".
En todo caso, Lotina asume la importancia de la final. "El fútbol es totalmente pragmático y sólo valen los resultados. Si ganamos y conseguimos la permanencia; si no, habrá palos para todos y a mí me van a caer por todos los lados, pero es la realidad del fútbol".
"Quiero ganar esta Copa, pero no para evitar todo eso, sino porque personalmente quiero tener la Copa cuanto antes y porque quiero que mi club la tenga y que mi afición disfrute, que es lo más bonito", dijo, refiriéndose después a su experiencia como aficionado.
KAMENI, TITULAR.
En cuanto al equipo que presentará mañana, por otra parte, Lotinaconfirmó la titularidad del portero Carlos Kameni, en detrimento de Gorka Iraizoz, aunque no dio pistas sobre el sistema de juego, en el que la duda radica en si formará con una defensa de cinco jugadores.
En este sentido, aludió a que cuenta con dos jugadores "un poco tocados", el defensa Alberto Lopo y el centrocampista Fredson Camara, que arrastran moelstias por sendas sobrecargas musculares, aunque el técnico espera que puedan jugar mañana en el Santiago Bernabéu.
Del Zaragoza, por otro lado, comentó que "es un equipo que ha ido de menos más, sobre todo en cuanto a resultados, porque creo que ha hecho un buen juego durante toda la temporada", y que cuenta con un "bloque bastante definido". "Es un equipo bonito al que gusta ver".
En su opinión, una de las claves ha sido que Víctor Muñoz ha situado en punta a Ewerthon, antes en la banda, junto a Diego Milito, y que Cani y Oscar, en las bandas, "han crecido como futbolistas", y cree que tiene "una buena defensa y un buen centro del campo".
POLEMICA CON VICTOR MUÑOZ.
Por último, no quiso avivar la polémica con Víctor cuando le comentaron que el entrenador del Zaragoza había declarado que Lotina va de "víctima" y "siempre está llorando", en relación a su queja por haber tenido que jugar el último partido de Liga el pasado domingo.
Lotina no quiere "abundar" en esta cuestión, en la que había pedido jugar el sábado aunque tuvo que hacerlo el domingo porque el Zaragoza no pudo adelantar su partido ya que el Sevilla había jugado el jueves en la Copa de la UEFA, y evitó entrar al trapo.
Así, mantuvo que sus argumentos tenían "todo el sentido común del mundo" y atribuyó las palabras de Víctor a la "tensión" que implica la cercanía de la final. Considera que el entrenador maño es "un buen tipo" y dijo que prefiere no responder a "palabras necias".
"Yo defiendo a mi club y lo defenderé siempre, guste a quien guste. Ante palabras necias no tengo que decir nada. Yo no tengo ninguna guerra con Víctor ni con el Zaragoza, pero defender a mi club es mi obligación y lo haré siempre, guste a quien guste".
