MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Racing de Santander no pasó del empate en El Sardinero (0-0) ante un Lugo que buscó más el gol, en la décima jornada de la Liga Adelante, que deja a cántabros cerca de los puestos de descenso tras cuatro jornadas sin saborear la victoria y a los gallegos en la zona templada de la tabla.
Los santanderinos salieron dispuestos a llevar el manejo del encuentro, conscientes de la necesidad de puntuar para salir del bucle de malos resultados en el que se hayan inmersos. Con el técnico Fabri en la grada por sanción, el Racing encerró momentáneamente a los lucenses en su campo, pero fue sólo un espejismo.
Superado el cuarto de hora los gallegos iniciaron su asalto llevando la iniciativa y controlando el balón, como ya hicieron en la eliminatoria de Copa del Rey que finalmente se decantó por el lado cántabro. Un disparo raso de Seoane fue la mejor ocasión de los visitantes, aunque el guardameta local no tuvo problemas para atajarlo. Sin embargo, el Racing pudo ponerse por delante si el colegiado del encuentro no hubiese anulado un tanto tras un testarazo de Bocanegra, que cometía falta en el salto ante Víctor Marco.
La ocasión más clara para los gallegos llegaría al filo del descanso. Óscar Díaz se plantaba solo ante Sotres, que desbarataba la ocasión; en el rechace, Tonetto pudo rematar a puerta vacía, pero el central Yuste estuvo atento e impidió que pusiese lanzar.
En la reanudación, el racinguista Óscar Pérez cabeceó directamente a las manos de Yoel, en una segunda parte con muy poca acción. El partido se desarrolló en el área local, pero el Lugo fue perdiendo ambición con el paso de los minutos.
Quique Setién, de vuelta a la que fuera su casa, dio entrada a Fran Sol por Tonetto para tratar de apurar las acciones de victoria, que finalmente no llegó. Sólo una falta botada por Bouazza y que obligó a Yoel a despejar a saque de esquina pudo cambiar el devenir del partido, que dejó a los dos partidos con un punto más.
