BUDAPEST, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
La nadadora española Gemma Mengual dio la primera alegría a la delegación española en los Campeonatos de Europa de natación, que se están disputando en Budapest, al colgarse la presea de plata en la disciplina de 'solo'.
La catalana (97,700 puntos), que ya había conseguido la segunda plaza en la primera jornada de competición, sólo fue superada por la rusa Natalia Ishchenko (98,400), mientras que la presea de bronce fue para la griega Nathalia Anthopoulou (93,900).
La 'sirena' barcelonesa realizó casi a la perfección su ejercicio al compás de los acordes de una nana de la portuguesa Dulce Pontes y logró emocionar a todos los espectadores presentes en la piscina húngara.
Con una técnica impecable, en una ejercicio que ha estrenado en la piscina magiar, y con más dificultad que el 'Salomé' que le dio el bronce en los pasados Mundiales de Montreal, Mengual se ganó al público, pero no a los jueces, que infravaloraron su actuación.
No obstante, la pupila de Anna Tarrés, que finalmente recibió una puntuación de 97,700 logró una plata que le sabe a gloria después de tres bronces consecutivos en las últimas tres citas continentales.
Como es habitual, la nadadora española estuvo perfecta a nivel artístico, haciendo gala de su extraordinaria expresividad, y demostró que a pesar de su edad, 29 años, sigue siendo un gran valor de la 'sincro' pues fue la única participante que logró mejorar su puntuación respecto a la anterior cita europea, celebrada en Madrid hace dos años.
ISHCHENKO OCUPA EL TRONO DE DEDIEU.
Ishchenko, por su parte, repitió el ejercicio que le valió el oro en los Mundiales de Montreal el pasado año con la música de la Banda Sonora de la 'Pasión de Cristo' como fondo en una actuación muy plástica y con bellísimos movimientos.
La rusa, que se adjudicó la plata en Montreal 2005, sucede en el palmarés a la mítica francesa Virginie Dedieu, que se retiró de la competición internacional en la cita canadiense.
Por otra parte, la jovencísima griega Nathalia Anthopoulou, de tan sólo 16 años, logró sorprender a sus rivales, como ya hiciera en la primera jornada, y se colgó la medalla de bronce después de una espectacular actuación, que significa la primera jornada para su país en la disciplina.
La gran decepción de la jornada la sufrió la italiana Beatrice Adelizzi, que partía como favorita al metal y terminó quinta, mientras que la ucraniana Darya Yushko fue cuarta y la israelí Anastasia Gloushkov consiguió la mejor clasificación de la historia para su país al terminar sexta.
