BARCELONA, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
La jugadora de waterpolo española Roser Tarragó pone fin a su carrera deportiva y, a sus 28 años, opta por liquidar una etapa en un momento elegido por ella y estando "feliz y tranquila" con lo conseguido, como un Mundial y dos Europeos así como dos medallas de plata olímpicas, la última en Tokyo 2020.
La barcelonesa, una de las mejores jugadoras de la selección de Miki Oca en la cita olímpica de Tokio y en los últimos años, no quiere dilatar más una etapa de su vida que tenía ganas de cerrar, como así lo expresó en sus redes sociales.
"¡Y hasta aquí mi carrera deportiva! Sí, lo dejo. Lo hago feliz y tranquila. Me considero una privilegiada de haber podido elegir el momento yo mismo, sin presiones de ningún tipo y con el apoyo de los que me quieren", manifestó.
Y elige este momento porque está "muy bien" y "muy satisfecha" de lo logrado. "Estoy muy bien pero también elijo este momento porque, por lo menos de momento, ya tengo suficiente. Pese a la satisfacción, me parece que seguir jugando sería forzarme a alargar una etapa que ya tengo ganas de cerrar", se sinceró la catalana.
Un adiós a las piscinas acompañado de muchos agradecimientos. "Quiero agradecer a los de mi entorno el apoyo incondicional. A todos los que formaron parte de mi regreso a la élite la paciencia y fuerza que me regalaron. Y a los que habéis formado parte de estos dos últimos años, gracias por darme el privilegio de compartir el waterpolo con vosotros", apuntó.
