DESCONECTA, 29 Abr.
En Japón, desde hace unos meses, se puede disfrutar de un trayecto en taxi sin preocuparse de los baches ni los bruscos frenazos. Tan sólo pulsando un botón, el conductor del Turtle Taxi (taxi-tortuga) modera su conducción a petición del cliente.
En diciembre del pasado año 2013, nacía en Japón un nuevo servicio único de taxis exclusivo para personas a las que no les importa el tiempo que tarden mientras tengan una agradable estancia en el vehículo.
El mecanismo es sencillo: en la parte de atrás del asiento, está el botón Yukkuri, que en japonés significa literalmente "lento", el pasajero que desee ralentizar la velocidad a la que está yendo el taxista, tiene que pulsarlo y disfrutar del paseo.
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Sanwa Kotsu es la empresa que ideó este exclusivo servicio, donde los conductores tienen la orden de acelerar y decelerar con cuidado, así como frenar sin movimientos bruscos y controlar la fuerza centrífuga en los giros de volante. La iniciativa ha tenido una gran acogida por parte de los ancianos y las mujeres embarazadas que, naturalmente, prefieren un viaje más suave.
De momento, 10 de las 500 cabinas de taxis tienen instalados los servicios del "taxi-tortuga", que se diferencian por tener una tortuga en la chapa del coche, y sólo están operando en la ciudad de Yokohama. Sin embargo, Sanwa Kotsu planea introducir su sistema en todas las cabinas de taxis para el próximo año, y ofrecer el servicio en las grandes ciudades como Tokio, Kanagawa y Saitama.
Desde que comenzó, la compañía ha registrado un aumento del 15% en el número de personas que solicitan específicamente este servicio.
