MADRID, 5 feb. (EDIZIONES)
La fotografía de un extraño animal compartida en redes sociales se ha hecho viral por un particular efecto óptico que impide adivinar a la primera qué clase de animal es. Este hecho ha provocado que todo tipo de interpretaciones hayan dado lugar a un distendido debate en el que la mayoría coincide en una sola cosa: es complicado verlo a la primera.
Si se trata de echar la culpa a alguien por esto (teniendo presente que no por verlo a la primera significa que vayamos a tener un cociente intelectual más alto que el resto ni nada por el estilo), no cabe duda de que el único sospechoso es un simple y vulgar efecto óptico.
La fotografía lleva rondando en Twitter desde que el usuario @govindatagle la subiese sin hacer comentario alguno a finales de enero. En cuestión de horas y con más de 3.000 retuits, la imagen comenzó a viralizarse y con ella las especulaciones sobre qué tipo de animal o ser aparecía en ella.
De entre todas las respuestas -muchas de ellas, muy imaginativas-, destacó la que el usuario @jerecosta7 hizo refiriéndose a la posibilidad de que fuese un ternero con alguna malformación.
A juzgar por la cantidad de retuits y 'me gusta' del tuit en cuestión, más de uno llegó a plantearse esta posibilidad.
El principal motivo de todo este embrollo no es otro que el efecto óptico producido por la postura del animal que, por cierto, es un perro. Sí, un perro tumbado de lado con la cabeza y cuello girados hacia arriba y mirando de reojo.
Una vez que lo veas, ya no podrás ver otra cosa.
