El 16% son extranjeros, el 97% cotiza por la base mínima y tres de cada cuatro estaría dispuesto a pagar más para cobrar el paro
MADRID, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los trabajadores autónomos económicamente dependientes, es decir, aquellos cuyos ingresos dependen en un 75% de un único cliente, se han incrementado un 70% en los últimos cinco años, hasta alcanzar los 324.921, y ya representan el 10,7% del total de autónomos existentes en España.
Según un informe elaborado por la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA) y presentado hoy en rueda de prensa por su presidente, Lorenzo Amor, y el director general de Economía Social y Trabajo Autónomo del Ministerio de Trabajo, Juan José Barrera, esta tendencia al alza de los autónomos dependientes proseguirá en los próximos años por la externalización de servicios que están llevando cabo las grandes empresas.
De los casi 325.000 autónomos económicamente dependientes contabilizados hasta el pasado mes de octubre, el 16,3% (52.962) eran inmigrantes. Dentro del colectivo de trabajadores extranjeros por cuenta propia, los autónomos dependientes representan el 32%, hecho que se explica por el peso de los inmigrantes en la construcción y el transporte, dos sectores donde tienen mayor presencia los autónomos dependientes.
Por comunidades, los trabajadores autónomos dependientes se concentran en mayor medida en Andalucía, con el 12,7% del total nacional, seguida de Madrid (9,8%), Castilla y León (9,7%), Comunidad Valenciana (9,5%), y Cataluña y Castilla-La Mancha, ambas con un 9,3%. Un caso llamativo es el de Baleares, donde uno de cada tres autónomos de la comunidad es económicamente dependiente, proporción que en Castilla-La Mancha alcanza a uno de cada cinco.
Según explicó Amor, el perfil de los autónomos dependientes coincide con el de un hombre joven dedicado al sector servicios. De hecho, el 69% de los autónomos dependientes son varones, más de la mitad tienen entre 25 y 44 años y el 53% desempeña su labor profesional en el sector servicios. En construcción, el porcentaje alcanza el 18%, en agricultura el 15% y en la industria, el 14%.
BASES DE COTIZACIÓN MUY BAJAS.
De acuerdo con los datos de este informe, subvencionado por el Ministerio de Trabajo, el 97,3% de los autónomos dependientes cotiza por la base mínima y sólo el 2,7% lo hace por una base superior. Eso sí, el 15,1% cotiza por contingencias profesionales, porcentaje muy superior al presentado por el total de autónomos, que asciende al 9%.
En cuanto al elevado número de autónomos que cotizan por la base mínima, el director general de Trabajo Autónomo subrayó que se trata de "un problema de educación y mentalidad" del colectivo. "El autónomo no debe ver la cotización a la Seguridad Social como un coste. Ha de ver también las contrapartidas", afirmó Barrera.
En este sentido, señaló que el debate sobre el Estatuto del Trabajo Autónomo, en el que se incluyen importantes mejoras en la protección social del colectivo, podría contribuir a producir este cambio de mentalidad.
El presidente de ATA también se mostró de acuerdo en que hay que hacer más esfuerzos, tanto desde la Administración como desde las organizaciones de autónomos, para informar al colectivo de que pueden cotizar por una base superior y obtener con ello muchas contraprestaciones.
DISPUESTOS A COTIZAR POR PARO.
Amor también dio a conocer datos de una encuesta que está realizando su organización, en la que se refleja que la renta media declarada por los autónomos económicamente dependientes asciende a 14.200 euros anuales, unos 1.200 euros al mes. Asimismo, el 87% de los autónomos dependientes afirma facturar a más de una empresa, si bien factura al menos el 75% a una empresa principal.
En cuanto a su conocimiento sobre el futuro Estatuto del Autónomo, el 63,6% de los trabajadores por cuenta propia dependientes dice haber oído hablar de él, aunque pocos, sólo el 14,6%, sabe que el mismo contiene una regulación específica sobre el trabajo autónomo económicamente dependiente.
Un dato llamativo es que casi la totalidad aboga por mejores prestaciones sociales, y tres de cada cuatro autónomos dependientes (el 73%) estaría dispuesto a cotizar por una hipotética prestación por desempleo, un porcentaje con el que Amor se mostró bastante satisfecho.
El Estatuto del Autónomo, que se prevé que esté aprobado hacia mediados de 2007, contempla la posibilidad de regular un sistema de protección por cese de actividad para el colectivo. En concreto, el Gobierno deberá proponer al Parlamento las especificidades de este sistema que, en todo caso, tendrá que ser financiado por los autónomos.
Precisamente, para conocer su disposición de cara a la financiación de este hipotético sistema, el Gobierno tiene la intención de efectuar una encuesta entre los autónomos que, según Barrera, podría llevarse a cabo en el segundo semestre del próximo año.
De cualquier forma, si los resultados de esta encuesta no son favorables y los autónomos rechazan por el momento y mayoritariamente esta especie de prestación por desempleo, Barrera señaló que, como derecho reconocido en el Estatuto, los trabajadores por cuenta propia "podrán tirar de su ley" para que el Gobierno de turno aplique esta medida.
