Economía/Macro.- Solbes mantiene la previsión de crecimiento del 3,3% para 2006 aunque ve "algún riesgo al alza"

Actualizado: martes, 11 julio 2006 16:40

BRUSELAS, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, dijo hoy que mantiene la previsión de crecimiento del 3,3% del PIB para la economía española en 2006 aunque sugirió que existe "algún riesgo al alza" que podrían mejorar esta cifra. Reconoció de nuevo su "preocupación" por la alta inflación y las dificultades para reducirla a causa de la evolución de los precios del petróleo.

"Mi sensación es que el crecimiento para este año del 3,3% sigue siendo una cifra válida y puede haber algún riesgo al alza", dijo Solbes en rueda de prensa al término del la reunión de ministros de Economía de la UE.

Recordó que el crecimiento del primer trimestre de 2006 fue de 3,5%, y que, para el segundo trimestre, aunque todavía no hay datos, "los indicadores son positivos". "Podríamos estar en el 3,5%, o podríamos estar en una cifra ligeramente inferior".

En todo caso, insistió en que "no es el momento de plantearse revisiones de crecimiento" y dijo que es partidario de actualizar las previsiones sólo dos veces al año.

Preguntado por el riesgo a la baja que representa la alta inflación, el vicepresidente admitió su "preocupación" pero descartó que "influya de forma significativa en términos de crecimiento". "No podemos estar satisfechos con una inflación del 4%, que es relativamente alta respecto a la Unión Europea", indicó.

Apuntó que existen una serie de factores que justifican estas cifras, como la evolución del precio del petróleo y la mayor intensidad de consumo energético en España respecto a otros países, o la evolución de los precios de los servicios y de la alimentación, especialmente del aceite de oliva, que contribuye en un 0,35 a la inflación.

"Aun estando en una situación que no nos gusta, debería ser una situación transitoria sobre todo cuando el comportamiento de la inflación subyacente está claramente por debajo de la inflación nominal", afirmó. A su juicio, "se hace más difícil" luchar contra la inflación en un contexto de altos precios del petróleo, pero se trata de un "punto fundamental a medio plazo" porque la subida de precios provoca una pérdida de competitividad.

DATOS POSITIVOS EN LA EUROZONA

Por su parte, el comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, dijo tras la reunión del Eurogrupo que la situación económica en la zona euro "está mejorando claramente" y anticipó que, si se confirma lo que apuntan los distintos indicadores, el crecimiento en 2006 podría superar el 2,1% del producto interior bruto (PIB), mejorando así las previsiones que hizo el Ejecutivo comunitario en mayo.

"En mayo estimamos el crecimiento para la zona euro este año en un 2,1%. Si los indicadores continúan como son hoy, nuestra próxima previsión provisional en septiembre podría mejorar esta cifra", dijo Almunia.

Admitió que hay "riesgos" ligados a la subida de los precios del petróleo, al incremento de la "volatilidad" en los mercados financieros, o a los desequilibrios económicos internacionales. "Pero nuestra visión de la economía de la zona euro este año es más optimista que hace dos meses", apuntó.

No obstante, el comisario pidió a los Gobiernos que sean "extremadamente cuidadosos" en la lucha contra la inflación, y que tomen las decisiones necesarias para no aumentar las expectativas de inflación, que se han incrementado en los últimos meses y se sitúan ligeramente por encima del objetivo del 2%.

Recordó que el Banco Central Europeo (BCE) es el principal responsable de controlar la inflación, aunque existen factores estructurales en la economía europea que ejercer presiones al alza en los precios en sectores como la vivienda o los servicios.

Por su parte, el primer ministro de Luxemburgo y presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, destacó que "la economía europea está sobre la buena vía, los resultados económicos son satisfactorios y estamos próximos al potencial de crecimiento". Alertó también de los "riesgos evidentes" por la evolución de los precios del petróleo y la inflación.

Preguntado por el impacto que podría tener que el BCE decrete una nueva subida de tipos de interés en agosto, Juncker se limitó a señalar que "si el Banco cree que puede aumentar los tipos de interés, será que considera también que el crecimiento en la zona euro es suficientemente robusto para poder acomodarse a otro aumento de tipos".