BARCELONA, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
La feria agraria de Sant Miquel de Lleida ha clausurado este domingo su LVI edición, celebrada del 30 de septiembre al 3 de octubre, con un balance positivo en el que se ha mantenido la afluencia de visitantes registrada el año pasado, unas 180.000 personas.
La organización ha celebrado que a pesar de la coyuntura económica la cita se haya mantenido, especialmente el salón Eurofruit gracias a la buena campaña de la fruta dulce, que el año pasado se vio especialmente castigada por causas climatológicas.
El alcalde de Lleida, Àngel Ros, ha considerado un acierto haber reducido la duración de la feria de cinco a cuatro días, lo que ha permitido a muchos expositores ahorrar costes manteniendo el nivel de público, informa la organización en un comunicado.
En el decurso del certamen, que ha tenido una cifra récord de 349 expositores distribuidos en una superficie neta de 26.500 metros cuadrados, Ros ha destacado el buen resultado de las jornadas técnicas, así como del nuevo salón 'Produqte', una feria de alimentación de calidad y proximidad.
La primera edición de 'Produqte' ha sido "una buena herramienta para aproximar el productor al consumidor final". La iniciativa ha reunido 62 expositores y ha acogido 24 actividades culinarias, talleres y conferencias.
El programa de actos paralelos de este año ha incluido ochenta actividades entre jornadas técnicas, reuniones profesionales, catas, demostraciones y actividades relacionadas con el Congreso Lleida Calidad.
Durante el evento se ha celebrado la XIV edición del Premio a la Innovación Tecnológica de Máquinas Agrícolas, cuyo primer premio ha sido para unas tijeras profesionales de poda con cabezal intercambiable, presentadas por la ferretería Osvald.
