MADRID, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Parlamentario de IU-ICV quiere que el Gobierno apruebe un "plan de rescate" para el sector del corcho que, entre otras medidas, facilite su internacionalización e impulse la promoción de los productos dentro y fuera del país, y que debería de estar dotado con 70 millones de euros.
Para ello, los diputados Gaspar Llamazares y Joan Herrera han registrado en el Congreso una proposición no de Ley, a la que tuvo acceso Europa Press, con la que pretenden que la Cámara inste al Ejecutivo a crear un plan que, además, adopte medidas para facilitar líneas de crédito del Instituto de Crédito Oficial (ICO) a las empresas del sector.
En la iniciativa, también se reclama un impulso para las redes existentes de apoyo al sector, que da empleo a 20.000 personas, entre trabajadores directos e indirectos y que supone un 30 por ciento de la producción y un 20 por ciento de la facturación mundiales, y se solicita que se facilite la concesión de seguros a la exportación.
IU-ICV justifica su petición en el "momento de gran dificultad" que vive el sector, con la aparición de tapones alternativos, metálicos y sintéticos, "de menor calidad"; el descenso que el consumo de vino registra a nivel mundial; y los problemas relacionados con la producción forestal. A esos problemas propios de la actividad, --prosiguen los diputados-- se une la situación de crisis económica mundial, que, con el descenso del consumo y las restricciones de crédito, "complican aún más la situación de la industria".
180 MILLONES EN PORTUGAL.
Llamazares y Herrera lamentan que el sector del corcho no haya recibido ningún impulso del Gobierno, que en los últimos meses sí ha apoyado a la construcción o a la automoción, y contraponen esta situación con la de Portugal, cuyo Gobierno aprobó el pasado mes de marzo un plan de apoyo al sector dotado de 180 millones de euros.
IU-ICV, que se hace eco así de las reclamaciones de las tres grandes asociaciones de empresarios corcheros, Isocor, Asecor y Arcork, mantiene que Portugal es uno de los mayores competidores de España en esta industria y la diferencia de actitud de los respectivos gobiernos deja a nuestro país en una "clara desventaja" frente a la industria lusa.
Por último, los diputados subrayan que la del corcho es una industria "respetuosa" con el medio ambiente, que permite crear empleo en áreas rurales y que, en definitiva, "representa en buena medida muchos de los aspectos de mejora del modelo productivo imprescindibles para una economía estatal más competitiva".
