Podría tomar "acciones negativas" contra la petrolera si tarda demasiado en deshacerse de la participación
MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
La agencia de calificación crediticia Fitch ha ratificado los 'rating' de Repsol tanto a largo como a corto plazo, situados en 'BBB+' (mejor nota dentro de la calidad aceptable) y en 'F2' (calidad buena), respectivamente.
La agencia adopta esta decisión después de que la petrolera presidida por Antonio Brufau anunciara la compra de un 10% de sus propias acciones a Sacyr, en una operación valorada en cerca de 2.500 millones de euros en la que Repsol se benefició de un descuento del 5%.
Fitch, que sitúa en estable la previsión de Repsol, dice tener una percepción "negativa" de la transacción en la medida en que "reducirá la liquidez de la petrolera a corto plazo".
No obstante, la reciente emisión de deuda por 850 millones de euros por parte de la petrolera reduce la presión sobre el calendario de amortización de la compañía y permite refinanciar la mitad de su pasivo con vencimiento en 2012.
Fitch espera que Repsol venda el 10% de la participación en los primeros seis meses de 2012 y que, de esta manera, sea capaz de recuperar su nivel de liquidez. "En caso de que Repsol no sea capaz de vender estas acciones en tiempo, Fitch adoptaría probablemente acciones negativas" contra el 'rating' de la petrolera, señala.
En todo caso, la actual perspectiva negativa responde a la impresión de Fitch de que Repsol mantendrá su posición de dominio en el mercado ibérico del refino y una adecuada posición de liquidez.
