PEKIN, 30 Mar. (Reuters/EP) -
El grupo Geely, primer fabricante privado de automóviles de China, tiene previsto inyectar 900 millones de dólares (unos 670 millones de euros al cambio actual) de capital circulante en la recién adquirida Volvo, con el fin de llevar a la firma sueca a recuperar la rentabilidad.
Así lo aseguró este martes el director financiero de Volvo, Yin Daqing, quien precisó que la empresa se ha asegurado financiación por importe de 2.700 millones de dólares (unos 2.000 millones de euros), lo que comprende los 1.800 millones de dólares de la adquisición (1.345 millones de euros) y los 900 millones de dólares (670 millones de euros) de capital circulante.
El responsable financiero de Geely explicó que la mitad del importe total procederá de fuentes de financiación de China, mientras que l 50% restante corresponderá a entidades financieras de otros países, principalmente de Suecia.
Los planes de Geely para Volvo pasan por recuperar la rentabilidad de la corporación escandinava aplicando economías de escala, es decir, aumentando la producción y reduciendo los costes por cada unidad fabricada, según explicó el presidente de la empresa china, Li Shufu.
El máximo responsable de la compañía asiática, que realizó estas declaraciones en un encuentro con los medios tras retornar de firmar los acuerdos de compra con Ford, entiende que la relación con Volvo debe ser "entre hermanos", y no "de padre a hijo".
Con estas declaraciones, Shufu reafirma la voluntad de la empresa asiática de mantener la identidad, la independencia y los valores propios de Volvo. En este sentido precisó que ni Geely producirá automóviles de Volvo ni Volvo fabricará coches de Geely. "Volvo viene del Norte de Europa y está radicado en Suecia. Volvo no sería Volvo nunca más si se le saca de su tierra", insistió.
Geely, que quiera decir "afortunado" en chino, pretende aprovechar el potencial de crecimiento del mercado automovilístico chino para recuperar la rentabilidad de Volvo. Para ello, construirá en China una planta, lo que permitirá duplicar la capacidad de producción de la firma escandinava.
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