MADRID, 17 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno sigue confiando en poder acordar la reforma laboral con los sindicatos y los empresarios pero "asumirá su responsabilidad" si el pacto no es posible, según aseguraron fuentes gubernamentales después de que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmase que esta reforma es su objetivo "inmediato".
Zapatero se expresó así durante la rueda de prensa de la Cumbre UE-Chile y, pocas horas después, cuando volvió a comparecer tras una reunión de la presidencia europea con los países del Caribe, animó a empresarios y sindicatos a llegar a un acuerdo "cuanto antes", sin plantearse el escenario de que el acuerdo sea imposible.
En concreto, reiteró que el plazo que se han dado los agentes sociales -el próximo 30 de mayo- le parece "razonable", de modo que llamó a ser "prudentes" ya que quedan pocos días para que termine ese plazo. Para Zapatero, la "mejor reforma laboral será la que más apoyo tenga".
El jefe del Ejecutivo dijo que, "más allá de las declaraciones" que están haciendo unos y otros, le consta que tanto UGT como CC.OO. y la patronal CEOE están "trabajando intensamente y con rapidez" en pro de un acuerdo para la "modernización" del mercado de trabajo.
Además, recalcó que esta modernización es "necesaria", y que así lo reconocen la sociedad española, los organismos internacionales y los analistas económicos. La reforma, añadió, debe servir para "garantizar más estabilidad a los trabajadores" y dar facilidades de contratación a los empresarios.
Según dijo, el Gobierno está trabajando con empresarios y sindicatos para "facilitar" ese acuerdo "en un plazo que sea breve" y expresó su "confianza" en que finalmente sea posible el acuerdo.
