La oferta logra una aceptación del 81% y supondrá un importe de 6,4 millones de euros para la socimi
MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
Merlín Properties se ha hecho con otro 0,31% del capital social de Testa a través de la oferta pública de adquisición de acciones (OPA) que lanzó sobre esta exfilial de Sacyr, de forma que ha elevado hasta el 77,32% su participación de control en la compañía.
La OPA de la socimi ha logrado la aceptación de un total de 472.527 acciones de Testa, representativas del 0,31% de su capital y del 81,24% del algo más de medio millón de títulos de la inmobiliaria a los que la operación se dirigía de forma efectiva, según informó la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Merlín lanzó el pasado mes de julio esta OPA de carácter obligatorio, tras superar el 50% de Testa, sobre el 100% del capital de esta empresa.
No obstante, la operación se dirigía de forma efectiva sólo a las 581.609 acciones de Testa, representativas del 0,38% de su capital, que aún cotizan en Bolsa.
En la OPA, la socimi que preside Ismael Clemente ha ofrecido pagar 13,54 euros por cada uno de los títulos de Testa. Este precio arroja una prima de alrededor del 1% respecto a la actual cotización de la inmobiliaria y eleva a 6,4 millones de euros el importe final que la operación supondrá para Merlín.
UN PASO MÁS HACIA LA FUSIÓN.
La OPA constituye un eslabón más en el proceso de compraventa de Testa acordado por Merlín y Sacyr el pasado mes de junio, con el que la socimi pretende fusionarse con la exfilial de patrimonio de la constructora para constituir la primera firma del ramo del país, con activos valorados en unos 5.800 millones de euros y rentas anuales de unos 300 millones.
Por el momento, Merlín ya se ha hecho con el 77,3% de Testa y tiene el compromiso de Sacyr de venderle el porcentaje del 22,6% que aún tiene en la empresa antes de que concluya el mes de junio de 2016.
En paralelo, la socimi trabaja en la venta de los activos de Testa que no considera estratégicos, como es un lote de un millar de viviendas en alquiler, y en refinanciar la deuda de 1.600 millones de euros que soporta la inmobiliaria.
