Los ministros de Energía del G-8 firman un acuerdo para fomentar el ahorro y combatir el cambio climático

Reuters
Actualizado: domingo, 8 junio 2008 21:23

TOKIO, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los ministros de Energía del G-8 acordaron al término de su encuentro en Aomori (Japón) el establecimiento de un nuevo marco internacional destinado a facilitar la implantación de medidas para el ahorro energético a través de una estructura denominada Asociación Internacional para la Cooperación en la Eficiencia Energética (AICEE) que combatiría, en última instancia, los efectos del cambio climático. Esta nueva iniciativa pretende contribuir a dar soluciones al constante aumento del precio del crudo sin presionar a la Organización de Países OPEP para que incremente la producción.

Esta asociación comprendería no sólo a los componentes del G-8 --Reino Unido, Japón, Italia, Canadá, Francia, Alemania, Rusia y Estados Unidos--, sino que se extenderá una invitación a países como China, India o Corea del Sur, también presentes en esta cumbre, según informa la agencia de noticias japonesa, Kyodo News.

Los ministros de estos países, responsables del 65 por ciento de la demanda energética mundial y de las cuotas más altas de emisiones de dióxido de carbono, expresaron su preocupación por los actuales precios del barril de petróleo, que se han duplicado desde el inicio de 2007 hasta alcanzar la cifra de 139 dólares el pasado viernes en Nueva York, una subida de diez dólares respecto de su precio anterior, registrando el mayor repunte jamás alcanzado en un sólo día.

Los asistentes a la reunión han discutido, según fuentes cercanas al encuentro, diversas respuestas a lo que calificaron como "el turbulento mercado del petróleo", entre las que se contemplan la necesidad de compartir los datos sobre el petróleo entre países productores y consumidores, así como el aumento de la inversión. Sin embargo, las delegaciones se abstuvieron de elaborar más detalles.

La AICEE pretende promover el desarrollo de las prácticas para el ahorro de energía de forma voluntaria, pero los países del G-8 esperan que la iniciativa se extienda con especial interés en las economías en vías de desarrollo, bajo el auspicio de la Agencia Internacional de la Energía.

"No hace falta decir que el cambio climático y las cuestiones energéticas son dos caras de la misma moneda, por lo que es indispensable solucionar estos problemas de forma precisa", explicó el ministro de Industria japonés, Akira Amari, tras la reunión mantenida en Aomori. No se ha especificado cuándo podría entrar en vigor esta asociación, pero Japón espera que la próxima cumbre del G-8 que tendrá lugar el año próximo en Italia pueda definir más detalles sobre su futuro funcionamiento.

ALZA DEL CRUDO

Sin embargo, la reunión se ha visto marcada por el cada vez mayor precio del que sigue siendo principal recurso energético del planeta, el petróleo. Los precios del crudo se dispararon más de 10 dólares el viernes, hasta un récord de 139 dólares el barril, el mayor aumento registrado en un sólo día.

El precio del crudo provoca la desaceleración del crecimiento económico global, acentúa las presiones inflacionistas y eleva el riesgo de protestas de pescadores, transportistas y otros sectores cuyos negocios están amenazados.

Atrapados entre el creciente descontento popular y la necesidad de invertir miles de millones de dólares en energía alternativa para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, los ministros del G8 ofrecieron pocas propuestas a considerar para los jefes de Estado que se reunirán el mes próximo.

"(Sobre) La eficiencia energética y diversificación, todos reconocemos que se han hecho grandes progresos, pero es necesario hacer más", dijo Gary Lunn, ministro de Recursos Naturales de Canadá.

En un grupo que cuenta con el mayor consumidor de petróleo, Estados Unidos, y con el segundo exportador de crudo del mundo, Rusia, pocos esperaban que la reunión terminara con el anuncio de medidas que puedan controlar la ola de aumentos de precios del combustible de los últimos seis años.

AUTARQUÍA

Sin embargo, el mensaje de los ministros parece intentar transmitir que las naciones consumidoras han asumido que deben encontrar nuevas fórmulas para cubrir sus propias necesidades, centrándose en la nuevas tecnologías, la conservación y la diversificación, en lugar de presionar a la OPEP para que eleve la producción, tal como reconoció el primer ministro de Australia, Kevin Rudd. Hasta ahora el mecanismo más recurrente era este resorte a una OPEP dominada por países afines a Washington y sus aliados.

Los ministros del grupo G-8 y los representantes de otras grandes economías como China, India y Corea del Sur, indicaron que comparten "graves preocupaciones" en torno al costo del crudo.

Los analistas coinciden con ellos. "Este es el desarrollo adecuado (...). Mejorará el equilibrio del suministro y la demanda a mediano y largo plazo, pero no tendrá un efecto inmediato en los precios", explicó Toshinori Ito, analista de UBS Sucurities Japan, en declaraciones a Reuters.

"Los precios del crudo están aumentando no porque tengamos escasez de abastecimiento, sino por la liquidez masiva", indicó Ito, en referencia al flujo de fondos financieros en los mercados, ayudados por las bajas tasas de interés.