MADRID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado de Orange España, Jean Marc Vignolles, ha asegurado que la compañía no se plantea que no se alcance el objetivo de que las 550 salidas fijadas en el ERE sean totalmente voluntarias ni tampoco vetar ninguna, salvo excepciones de carácter muy específico.
En la presentación de los resultados de 2015, Vignolles recordó que la mesa negociadora comenzó la pasada semana y se prolongará hasta mediados de marzo para llegar a un acuerdo con los representantes de los trabajadores sobre las condiciones de ejecución.
Asimismo, subrayó que la voluntad de que todas las bajas sean voluntarias muestra el compromiso social de la empresa de excluir del plan las marchas forzosas y señaló además que el apoyo de la empresa al empleo se ve reflejado en la creación de 300 puestos de trabajo en los centros de atención al cliente de Oviedo y Guadalajara.
Vignolles remarcó además que el plan de bajas voluntarias, que irá acompañado además de un plan de prejubilaciones, afectará a todos los niveles de la empresa y en todas las áreas.
Por otro lado, Vignolles remarcó que este plan se enmarca en su objetivo de mantener la competitividad y la eficiencia de la empresa en el futuro, en un contexto de mercado que va a seguir siendo muy competitivo, pero afirmó que no es un elemento necesario para lograr las sinergias comunicadas a los mercados.
En este sentido, recordó que, como ya señalaron cuando se anunció la fusión, las sinergias de 1.800 millones de euro hasta 2018 previstas no preveían que la reducción de los costes laborales fuera un "elemento clave" para lograrlas.
