MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó hoy que el superávit público podría superar el 1,8% del PIB este año, y añadió que la deuda pública se situará en el 34% del PIB en 2008, alcanzando así este porcentaje dos años antes de lo inicialmente previsto.
Durante su participación en las jornadas de 'The Economist', Zapatero indicó que esta legislatura ha sido la primera de la democracia en la que se alcanzado superávit cada uno de los ejercicios, y señaló que en 2006 se consiguió la cifra "histórica" del 1,8% del PIB, porcentaje que, según dijo, se volverá a alcanzar este año, "o algo más incluso".
Zapatero, quien destacó que el sector público está incrementando su ahorro y, por tanto, se está dotando de un mayor margen de maniobra para el futuro, indicó que en 2008 se habrá reducido la deuda pública al 34% del PIB, mejorando en dos años el objetivo que se había marcado para 2010.
El jefe del Ejecutivo también resaltó que el "elevado" nivel de crecimiento de los últimos años, junto con la mejora de la productividad --ha pasado de un crecimiento del 0,3% al 0,8%--, va a permitir que el poder adquisitivo de los salarios aumente un 1,2% en 2007.
En este contexto de mejora salarial, Zapatero recordó el incremento del precio del petróleo y de algunos alimentos frescos, y apeló a la actitud "responsable" en materia salarial de sindicatos y empresarios, que "han evitado espirales inflacionistas que habrían deteriorado la competitividad de la economía".
En este punto, afirmó estar "convencido" de que se mantendrá esta "política responsable" de cara al futuro, a pesar de las últimas subidas de precios, que han colocado la inflación en noviembre en el 4,1% interanual.
CAMBIO EN EL PATRÓN DE CRECIMIENTO
En cuanto a la evolución de la economía española y tras asegurar que esta legislatura va a ser "la mejor de la democracia" para la economía y las políticas sociales, Zapatero indicó que el crecimiento del 3,8% del PIB en el tercer trimestre es una tasa "elevada" y, además, supone un cambio en el patrón de crecimiento de la economía, dado que se desacelera la construcción, mientras la inversión en bienes de equipo crece el 11% y las exportaciones al 8%.
Por ello, aseguró que la economía española tiene ahora un crecimiento "más equilibrado y sostenible", y añadió que "no va a tener nostalgia de la construcción" que, en cualquier caso, seguirá aportando al crecimiento económico de "forma razonable", tras unos años de aumento "excepcionales".
Zapatero destacó también que en esta legislatura se han creado tres millones de puestos de trabajo, "más que Alemania, Francia y Reino Unido juntos", que la tasa de paro se ha situado en la media de la UE y que en muchas zonas de España existe ya pleno empleo. Sobre la temporalidad, indicó que se ha reducido, pero admitió que aún está "demasiado alta" respecto a la media comunitaria.
EXISTEN "RIESGOS"
Tras mencionar las "fortalezas" de las que dispone la economía española para seguir creciendo en un entorno global con "alguna incertidumbre", el jefe del Ejecutivo indicó que España se enfrenta también a determinados "riesgos", como los acaecidos en los últimos meses en los mercados financieros internacionales, que han afectado, en su opinión, a la confianza de los inversores y a la liquidez de dichos mercados.
Sin embargo, apuntó que los efectos de esta crisis serán "limitados", dado que tienen un "carácter transitorio", al tiempo que son "asimétricos", porque no están afectando por igual a todas las economías, y "localizados" porque se concentran en las hipotecas 'subprime' de Estados Unidos.
Así, destacó que la economía española presenta una serie de "ventajas" para hacer frente a esta situación, entre las que mencionó el "amplio margen de maniobra" de la política presupuestaria y el superávit de la Seguridad Social, el cambio del patrón de crecimiento de la economía, con un mayor peso de la inversión productiva, y la "solvencia" del sistema bancario español.
MOROSIDAD EN NIVELES "RAZONABLES"
Sobre este último punto, afirmó que los bancos españoles son "muy solventes y rentables", y agregó que, pese al "ligerísimo" aumento de la morosidad", ésta sigue en niveles "muy razonables", dado el aumento de la renta disponible de las familias y el importante aumento de los beneficios empresariales.
Finalmente, Zapatero estableció como "prioridades para los próximos años" el incremento del bienestar de los españoles a través de la creación de empleo, y fijó como un objetivo primordial la consecución del pleno empleo. Además, afirmó que es imprescindible convertir a España en una economía del conocimiento y comprometida con el cambio climático.
