SEVILLA, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Andalucía ha decidido autorizar de forma excepcional el uso de la alimentación convencional para el ganado ecológico ante la situación de sequía. La autorización será de aplicación en las explotaciones ganaderas ecológicas de todo la comunidad, al constatarse que el déficit de precipitaciones ha contribuido a la bajada de rendimientos de los cultivos y de forma especial y muy acusada a la de los pastos, afectando de manera generalizada a todo el territorio.
Según el Ejecutivo andaluz, esta medida atiende a la solicitud del sector ganadero y es fruto del compromiso del Gobierno de Juanma Moreno con el mantenimiento de los sectores productivos para paliar los efectos de la falta de agua y para prevenir problemas de bienestar animal.
Un informe presentado este martes por la Consejería de Agricultura al Consejo de Gobierno subraya que esta situación ha repercutido especialmente en el sector de la ganadería ecológica en extensivo porque su alimentación depende de los pastos y productos y subproductos de los cultivos de secano, todos ellos dependientes de la lluvia.
En concreto, el permiso temporal y excepcional de uso de alimento convencional se aplicará a las producciones ganaderas ecológicas de las especies cuya alimentación se basa en pastos, cultivos de secano y la vegetación silvestre. En concreto, las especies contempladas por la medida excepcional son bovino, equino, ovino, caprino, porcino extensivo y abejas. El uso temporal de esta alimentación se extenderá hasta el 31 de enero de 2023, salvo para las abejas que finalizará el 28 de febrero de 2023.
TIPO DE ALIMENTACIÓN
La autorización permite que los animales puedan alimentarse con piensos no ecológicos en lugar de piensos ecológicos o en conversión, cuando se pierda la producción de piensos o se impongan restricciones.
Además, este permiso excepcional también afecta a la apicultura ecológica, que podrá alimentar las colmenas de forma artificial con miel producida ecológicamente y, de forma preferente, de la misma unidad ecológica, azúcar ecológico o jarabe de azúcar ecológico.
Sólo se podrá emplear alimentación artificial entre la última recolección de la miel y los 15 días anteriores al siguiente periodo de afluencia de néctar y de mielada.
