Actualizado 17/01/2008 14:56

África.- Las inundaciones del sur de África han acabado ya con la vida de 40 personas y la situación podría empeorar

BLANTYRE (MALAWI), 17 Ene. (Reuters/EP) -

Las inundaciones que arrasan al sur de África han acabado ya con la vida de 40 personas y se están convirtiendo en una creciente crisis humanitaria que asola la región, que reclama más ayuda económica de los países occidentales.

Las lluvias torrenciales caídas sobre Zambia, Malaui, Zimbabue y Mozambique han provocado que se desbordaran numerosos ríos, como sucedió el viernes en Malaui, donde murieron tres personas y cientos hubieron de ser alejadas de sus casas. En las últimas semanas, miles de personas han tenido que ser desplazadas en todos los países de la región.

La ONU ha informado de que en Mozambique han muerto siete personas y tres en Zambia. La peor parte en el saldo de muertos se la ha llevado Zimbabue, con 27 víctimas desde mediados de diciembre, aunque la cifra aún no ha sido confirmada por las autoridades. Además, algunos no murieron ahogados, sino a manos de los cocodrilos.

Aparte de las víctimas mortales, las pérdidas materiales en estos países están siendo abundantes, como en Malaui, donde las riadas arrasaron cultivos y ganadería. En el distrito sur del país, donde la escasez de alimentos empieza a ser preocupantes, 200 personas de 24 pueblos diferentes fueron desalojadas la semana pasada cuando se desbordó el río Shire, entre otros.

El presidente de Zambia, Levy Mwanawasa, hizo un llamamiento a los países occidentales para que envíen una ayuda de alrededor de 13 millones de dólares (casi 8,9 millones de euros) para que su Gobierno sobrelleve de la mejor manera posible el desastre, después de que el agua dañara una autopista de intercambio entre su país y Mozambique. Mwanawasa reconoció que "normalmente no está bien solicitar apoyos de este tipo", pero dijo estar "preocupado por el daño causado a la infraestructura", que es "clave" para Zambia. El presidente añadió que su Gobierno "no puede responder por sí solo a la crisis".

Pero si la situación en Zambia es crítica, no lo es menos en Zimbabue, donde la crisis económica anterior a las inundaciones y con un nivel de inflación superior al 8.000 por ciento, ya estaba provocando escasez de alimentos e hidrocarburos. Esta crisis se agudizó en el año 2000, cuando el presidente del país, Robert Mugabe, confiscó las productivas granjas de los blancos y se las entregó a los inexpertos negros, mucho menos prósperos.

El Gobierno de Mugabe, que está recibiendo la ayuda de diferentes asociaciones benéficas, confía en que el asunto económico mejore con una buena cosecha en 2008. Sin embargo, los servicios meteorológicos de Zimbabue han anunciado que podrían caer "lluvias significantes" en los próximos días y empeorar las inundaciones en el norte del país.

Por último, Mozambique lucha por reducir los efectos del agua, después de que la ONU anunciara esta semana que las inundaciones podrían convertirse en el mayor desastre de la historia del país, superando a las riadas de 2000 y 2001, que acabaron con la vida de más de 700 personas.

Las fuertes precipitaciones son comunes en el sur de África durante la época de lluvias, que suele ir desde noviembre hasta abril, aunque las incesantes lluvias no lo son tanto y han cogido de sorpresa a las autoridades.