Actualizado 09/06/2010 15:39

Expertos europeos subrayan la necesidad "urgente" de actuar antes de 2015 para descarbonizar la economía en 2050


MADRID, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un informe realizado por la European Climate Foundation, en el que han participado varios institutos y centros de investigación europeos, presentado este miércoles en Madrid, pone de manifiesto la "necesidad urgente" de actuar antes de 2015 con una receta de cinco puntos con el objetivo de lograr un sector eléctrico de baja emisión de carbono y reducir las emisiones en un 80 por ciento en 2050.

Así, el estudio 'Roadmap 2050: guía práctica para una Europa próspera y de bajas emisiones de carbono', plantea que éstas políticas a corto plazo deberán centrarse en una política de eficiencia energética más agresiva que ahorre costes y reduzcan demanda; la expansión de la red eléctrica; la integración y coordinación regional de las operaciones del mercado; la reforma de los mercados de energía; las redes inteligentes y un compromiso firme con plazos fijos para la retirada paulatina de los activos de altas emisiones de carbono. Además, señala que es necesaria una reforma del mercado para asegurar un incentivo a largo plazo para los inversores.

En el análisis se subraya que estas cinco medidas son urgentes para que Europa logre sus objetivos económicos, de seguridad energética y climática y que, para ello, se necesitan en el corto plazo inversiones "imprescindibles" en eficiencia energética y en infraestructuras adecuadas de redes eléctricas en Europa, para obtener un sector eléctrico de bajas emisiones que puedan ofrecer la misma fiabilidad que el actual.

Asimismo, 'Roadmap 2050' analiza varios escenarios de descarbonización para el sector eléctrico y que exponen las consecuencias a corto plazo del este compromiso a largo plazo. Se trata de tres caminos para lograr la reducción del 80 por ciento de las emisiones en 2050 que consisten en: 40 por ciento de renovables y 60 por ciento con no renovables de baja emisión como captura y almacenamiento de carbono y energía nuclear; 60 por ciento de renovables y 40 por ciento de no renovables de baja emisión; y 80 por ciento de energías renovables con un 20 por ciento restante a repartir en partes iguales entre combustibles fósiles y nuclear. También ha estudiado la viabilidad técnica y económica de un escenario de adelanto tecnológico con 100 por cien de electricidad renovables.

En la presentación, el director ejecutivo de la European Climate Foundation, Jules Kortenhorst, ha destacado el liderazgo de España dentro de la UE respecto a las energías solares y eólicas, por lo que este país está en una posición "privilegiada para beneficiarse de la transición a una sociedad próspera basada en bajas emisiones de carbono". Igualmente, ha pronosticado que con la ampliación de la red eléctrica europea, España puede vender su electricidad a otros países, creando empleo y nuevas oportunidades.

"El liderazgo por parte de España será muy valioso a la hora de asegurar la transición de Europa hacia una economía de bajas emisiones de carbono sea una realidad", ha manifestado.

REDUCIR EMISIONES: MOTOR DE DESARROLLO

Por su parte, la secretaria de Estado de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), Teresa Ribera, ha subrayado que reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en un 80 por ciento para 2050 en Europa puede ser un "magnífico motor" de recuperación económica, pero también para la innovación tecnológica, académica y empresarial y, además, para reducir las tensiones sociales y los conflictos.

Durante la presentación del informe, Ribera ha asegurado que el viejo continente está necesitado de un nuevo enfoque para llegar a una economía baja en carbono y ha expresado que "seguir siendo claves solo puede hacerse sumando fuerzas", a pesar del problema del coste de inversión inicial, que se compensa con unos costes de operación en el medio y largo plazo, que son "esperanzadores".

En ese sentido, ha reflexionado que tras los últimos 50 años de "esplendor" Europa "no puede convertirse en un museo de la ilustración ni quedarse en la melancolía de lo que ha sabido construir", porque la gran aportación del presente puede ser el campo de la energía y la reducción de emisiones, para lo que el sector eléctrico deberá estar "prácticamente descarbonizado" y el sector transporte tendrá que sufrir una "verdadera transformación".

Además considera que es preciso superar las necesidades de interconexión eléctrica en Europa y dar una respuesta que aspire a consolidar una propuesta "solvente en los próximos 20 años", porque una red eléctrica europea "bien desarrollada es necesaria" para utilizar todos los recursos de generación eléctrica de la mejor manera posible".

ESPAÑA, EXPERIENCIA Y LÍDER

En su opinión un actor "global" como Europa no puede "desconocer las claves" que aporta el informe Roadmap 2050 para gestionar los restos en materia de energía y cambio climático. "España debe impulsar activamente este debate, cuenta con la experiencia de un mercado maduro y, por primera vez en nuestra historia dispone de aquello que los demás demandan", ha apuntado.

Respecto al estudio, ha valorado que su clara exposición de que la electricidad limpia es necesaria y representa un elemento "importante" en la transición de Europa hacia la economía baja en emisiones de carbono. "Esto podría ser posible solamente si la lucha contra el cambio climático está basada en una cooperación política eficaz dentro de Europa y con el resto del mundo", ha concluido.

Finalmente, el presidente del Real Instituto Elcano ha destacado que este tipo de proyectos son de gran ayuda en el reto de reducir las emisiones en un 80 por ciento en 2050 para lograr quedarse por debajo de un incremento de 2 grados centígrados respecto a la era pre-industrial. En ese camino, ha adelantado que de aquí a la próxima Cumbre del Clima que se celebrará en Cancún se presentarán nuevos análisis con la postura de las distintas regiones internacionales.