GINEBRA, 26 Jun. (Reuters/EP) -
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha alertado de que el recrudecimiento de la violencia en la capital de Somalia, Mogadiscio, ha ocasionado más de 250 víctimas civiles y unos 160.000 desplazados desde que la insurgencia intensificó sus ataques el pasado 7 de mayo.
El portavoz de ACNUR, William Spindler, declaró que los combates "están dejando un rastro de bajas civiles, destrucción y nuevos desplazados". Asimismo, señaló que esta situación ha hecho que se reduzca el reparto de "ayuda humanitaria urgentemente necesaria para los desplazados dentro y alrededor de Mogadiscio".
Los hospitales han contabilizado más de 250 civiles muertos y unos 900 heridos durante este periodo, mientras que el Comité Internacional de Cruz Roja (CICR) eleva la cifra de heridos a más de 1.500 en los centros hospitalarios de Medina y Keysaney, muy por encima de su capacidad.
Respecto a los refugiados, Spindler relató que más de 160.000 personas han huido a otras regiones de Somalia o a países vecinos. El CICR está trabajando con la Media Luna Roja somalí para distribuir mantas, ropa y otros bienes de primera necesidad entre los cerca de 60.000 civiles que recientemente se han dirigido a las afueras de Mogadiscio, elevando a medio millón el número de desplazados en las inmediaciones de la capital.
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