Actualizado 10/05/2018 17:44

El Reina Sofía celebra el Día Mundial de Lupus concienciando y visibilizando la enfermedad

Mesa instalada en el centro Carlos Castilla del Pino
JUNTA DE ANDALUCÍA

CÓRDOBA, 10 May. (EUROPA PRESS) -

El Hospital Universitario Reina Sofía y la Asociación de Apoyo a la Convivencia en el Lupus en Córdoba (Acolu) han celebrado este jueves el Día Mundial de Lupus con la instalación de una mesa informativa a la entrada del Edificio de Consultas Externas y en el Centro de Especialidades Carlos Castilla del Pino para concienciar y visibilizar la enfermedad.

Según ha indicado la Junta de Andalucía, también se ha hecho hincapié en la importancia del diagnóstico precoz de esta enfermedad, ya que con los tratamientos adecuados logran mejorar de forma ostensible el pronóstico y la calidad de vida de las personas afectadas.

El complejo hospitalario es puntero en el ámbito clínico e investigador en el lupus. Se trata de una enfermedad crónica que presenta una sintomatología variada, tiene una afectación multisistémica (puede afectar al riñón, la piel, el sistema nervioso central, articulaciones, etcétera). La Unidad de Gestión Clínica de Reumatología del complejo sanitario cordobés es una de las implicadas en el tratamiento del lupus.

El abordaje de esta enfermedad se hace de manera multidisciplinar con la participación de diversas especialidades, ya que puede afectar a muchos órganos, si bien los especialistas de referencia son los reumatólogos.

El hospital cuenta una consulta monográfica que permite tratar la enfermedad desde la infancia y hasta la edad adulta. En la provincia de Córdoba padecen esta enfermedad de 300 a 400. Según los especialistas, esta patología se puede presentar a cualquier edad, aunque es más frecuente de los 15 a los 40 años y el 90 por ciento de los afectados son mujeres.

La reumatóloga del hospital, responsable de la consulta monográfica de lupus, María Ángeles Aguirre, ha indicado que anualmente se detectan unos 25 casos nuevos. Los tratamientos de inicio, explica la especialista, "se basan en fármacos antipalúdicos, inmunosupresores y corticoides y únicamente en los casos en los que la enfermedad no se logra controlar se valora continuar con las terapias biológicas".

En realidad, ha proseguido la doctora, "estudiamos cada caso de manera personalizada, ya que la manifestación de los síntomas y su afectación es muy variada, y adaptamos el arsenal terapéutico a cada paciente". Todos los tratamientos persiguen mantener a los pacientes controlados y estables para evitar posibles brotes de la enfermedad o actuar en caso de que éstos se produzcan.

En los últimos, años la novedad más importante en el abordaje de este grupo de enfermedades es la aparición de fármacos biológicos y de otros fármacos más eficaces que actúan controlando la enfermedad. Esto, junto a la detección más precoz y el abordaje multidisciplinar, son aspectos clave que ayudan a mejorar la calidad de vida de estos pacientes.

En cuanto a la investigación en lupus, el Instituto Maimónides de Investigación Biomédica (Imibic) y los profesionales del Hospital Universitario Reina Sofía están desarrollando en la actualidad varios estudios sobre los mecanismos de trombosis y posibles tratamientos de esta patología en los que participan las reumatólogas María José Cuadrado y María Ángeles Aguirre, el hematólogo Francisco Velasco y la investigadora Rosario López.

EVOLUCIÓN DEL LUPUS

El lupus evoluciona en la mayoría de los casos en forma de brotes. Estos consisten en periodos de mayor actividad de la enfermedad que pueden ser desencadenados por diferentes factores y que producen síntomas y signos en diferentes órganos. Los brotes son importantes porque pueden producir síntomas generales (malestar, cansancio, dolores articulares, etcétera) y síntomas a nivel de órganos vitales como el riñón, corazón, pulmón o cerebro, y en los que pueden ocasionar daños irreversibles.

Según ha explicado la doctora Aguirre, "hay varias circunstancias que conocemos como desencadenantes de brotes como puede ser la exposición a la luz solar, las infecciones, el estrés, algunos tratamientos hormonales, el embarazo, postparto, etcétera, y algunos de estos factores podemos evitarlos".

Desde la Asociación de Apoyo a la Convivencia con el Lupus en Córdoba se trabaja para dar asesoramiento y orientación a las personas diagnosticadas de esta enfermedad, a fin de ayudar a mejorar su calidad de vida, apoyar la investigación para conseguir mejores tratamientos y un diagnóstico precoz. Cada año, impulsan campañas de sensibilización para dar a conocer la enfermedad en la provincia.

En España, el lupus afecta a unas 40.000 personas, de las que el 90 por ciento son mujeres. Normalmente, el sistema inmunitario produce anticuerpos que protegen el organismo frente a agentes externos, sin embargo, en las personas con lupus, algunos de estos anticuerpos atacan las propias células del cuerpo. Se trata de una enfermedad crónica de origen desconocido que puede llegar a afectar a articulaciones, músculos y órganos como la piel, el cerebro, corazón, pulmones, vasos sanguíneos o riñones.

El lupus eritomatoso es una de las enfermedades que se agrupan en las denominadas autoinmunes. Existen más de 80 enfermedades autoinmunes clínicamente diferentes, cada una de las cuales afecta al organismo de una manera distinta --presenta un tipo de anticuerpo característico-- y su manifestación también puede variar de un paciente a otro con la misma patología. En Córdoba existen en estos momentos unas 700 personas con algún tipo de enfermedad autoinmune y cada año se diagnostican nuevos casos.