SEVILLA, 23 May. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, Rocío Blanco, ha asegurado este jueves que su departamento se ha marcado como
"prioridad" evaluar "con rigor" el impacto de las políticas activas de empleo que se han desarrollado en los últimos años, así como las que se pondrán en marcha.
Durante su comparecencia en la Comisión de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, Rocío Blanco ha recordado que la evaluación el impacto de las políticas públicas, y la exposición pública de sus resultados, son elementos clave en la agenda de la Comisión Europea.
En esta línea, la consejera ha explicado que evaluar con rigor "significa identificar qué está funcionando y qué no en una determinada política activa que se financia con el dinero de todos los ciudadanos", y que hasta el momento este examen se ha ceñido al seguimiento de la ejecución presupuestaria "sin ahondar en el análisis de la empleabilidad desde la perspectiva del impacto real en el mercado de trabajo".
EQUIPO DE TRABAJO
Para llevar a cabo esta tarea, Rocío Blanco ha informado que un equipo de trabajo interno del Servicio Andaluz de Empleo, la Unidad de Evaluación, ha empezado a desarrollar esta labor de forma permanente sobre los programas que se pongan en marcha, comenzando por la ejecución de los actuales planes de empleo que ejecutan los ayuntamientos, con el desarrollo de las Iniciativas de Cooperación Social y Comunitaria que supusieron la contratación de unos 28.000 desempleados.
La actual evaluación de estos planes se centra en una actuación que ha contado con un presupuesto de 250 millones de euros en su convocatoria de 2016, prácticamente la mitad del presupuesto de políticas activas, y Rocío Blanco ha detallado que abordará cuatro aspectos, entre los que se encuentra la cobertura: cuántas personas
se han beneficiado de la medida y si existen sesgos que afecten a determinado colectivos.
En segundo lugar, se prevé realizar un análisis de "implementación", para conocer qué aspectos pueden mejorarse, así como un examen de eficacia para conocer el número de contratos y acreditaciones de cualificación profesional ligadas a los contratos realizados por los ayuntamientos en los proyectos.
Por último, se pretende realizar una medición del impacto real en la mejora de la empleabilidad de los beneficiarios. En este sentido, no solo se analizará la inserción laboral posterior de los desempleados contratados, sino también si existe una relación causal entre su paso por el programa y el empleo al que han accedido en el
mercado laboral.
Rocío Blanco ha añadido que, tras esta primera evaluación, la Unidad de Evaluación continuará con el análisis de otros programas como las Experiencias Profesionales para el Empleo, los Itinerarios Personalizados de Inserción y los servicios de orientación laboral.
