Se ha conseguido reintroducir al cien por cien de los anfibios
SEVILLA, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
La red de Centros de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) ha conseguido recuperar y reintroducir en el medio natural más de 4.600 ejemplares, cantidad que supera el 64 por ciento de los animales ingresados en 2018, que fueron 7.180, además de otros 673 que llegaron muertos a los CREA para que les fuera practicada la necropsia.
A los ejemplares recuperados durante el pasado año se suman casi 150 ejemplares más liberados en 2018 pero que ingresaron en años anteriores en alguno de los centros que forman esta red, ya que al cierre de la anualidad de 2017 quedaban aún en recuperación en los CREA un total de 441 ejemplares. A fecha de 31 de diciembre de 2018, el registro contabiliza 251 animales en recuperación en estas instalaciones (3%).
El pasado año ha destacado especialmente el ingreso en el CREA de Córdoba de 1.874 gallipatos procedentes de una alberca del campus universitario y que se limpia de forma periódica, ha explicado en un comunicado la Junta.
Estos animales se trasladan al centro y desde allí, tras confirmar su buen estado sanitario, se reintroducen en diferentes charcas de la provincia con el fin de fortalecer las poblaciones de esta especie.
En general, los animales con mejor índice de recuperación son los anfibios (cien por cien) ya que la causa de sus ingresos es la extracción de hábitat. Los mamíferos tienen un porcentaje de recuperación de casi el 67 por ciento, mientras que las aves alcanzan el 54 por ciento y los reptiles rozan el 36 por ciento.
El 63 por ciento de los ingresos anuales se concentran en los meses de verano y la mayor parte de estos ingresos (57%) son pollos caídos de nido (28,4%) y ejemplares ingresados por extracción de hábitat (28,7%). La segunda causa de ingreso con más relevancia son las colisiones, entre otras, con alambrada, tendido eléctrico o aerogeneradores. Los animales que llegan a los centros por esta casuística suponen alrededor del 17 por ciento de los ingresos.
Los ciudadanos son los colaboradores con más representación a la hora de dar avisos y comunicar el hallazgo de ejemplares accidentados (más del 50% de los ingresos). Esta cooperación es esencial para que los animales puedan ser recuperados tras ser atendidos en los centros.
