La noche de su arresto había recorrido más de 300 kilómetros por vías secundarias y robado en locales de siete municipios
A CORUÑA, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Servicio de Policía Judicial de la Guardia Civil de A Coruña han tenido a un vecino de la localidad coruñesa de Carballo acusado de más de 30 robos cometidos desde mayo.
Según ha informado el instituto armado, a las 7.00 horas del lunes fue arrestado en Paiosaco J.P.G., un varón de 39 años de edad y con "un amplio historial delictivo", por su supuesta implicación en una treintena de delitos contra la propiedad cometidos desde el pasado mes de mayo.
Con esta detención, la Guardia Civil da por desarticulado uno de los grupos de delincuentes "más activos" detectados en los últimos años en la provincia de A Coruña, han indicado las mismas fuentes.
Las investigaciones que culminaron con esta detención se habían iniciado a raíz del robo con violencia de un turismo en la localidad de As Pontes. El vehículo, un Renault Megane F-1, fue precisamente el que dio nombre a las posteriores pesquisas, quedando nombrada policialmente como 'Operación Fórmula 1'.
En los meses posteriores al robo de este vehículo los agentes del Grupo de Patrimonio de la Guardia Civil de A Coruña, en el seguimiento de los delitos que podrían estar relacionados con este suceso, pudieron constatar ciertas pautas de conducta del grupo investigado, que permitirían diseñar un dispositivo especial para su localización y detención.
Así fue como la pasada madrugada, y tras tener conocimiento de que esa noche se habían cometido varios robos en bares y restaurantes de diversas localidades de los municipios de A Estrada, Silleda, Arzúa, O Pino, Pontecarreira, Curtis y Ordes, los agentes del Servicio de Policía Judicial establecieron de inmediato el operativo policial que permitiera la interceptación del vehículo, objetivo que se logró en Paiosaco-Laracha.
HUIDO
De este modo fue detenido J.P.G., logrando su acompañante huir monte a través. La Guardia Civil continúa por ello con las gestiones que permitan la localización y detención del resto de componentes que podrían formar este grupo.
De igual manera, la Guardia Civil sigue también con las investigaciones que esclarezcan la totalidad de los hechos delictivos que podrían haber perpetrado. A día de hoy se estiman en una treintena, repartidos por las provincias de A Coruña, Lugo y Pontevedra, siendo sus objetivos principalmente las máquinas recreativas y expendedoras de tabaco instaladas en establecimientos comerciales y de hostelería.
