POIO (PONTEVEDRA), 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
La conselleira do Mar, Rosa Quintana, ha asegurado este lunes que "el futuro" y el "liderazgo mundial" del sector conservero gallego dependerá "en buena parte" de "la implantación y aplicación de actividades de I+D+I" del "desarrollo de nuevos productos para llegar a todos los mercados y adaptarse a las nuevas tendencias de consumo"
Así lo ha manifestado Quintana tras una visita realizada a la fábrica de conservas de pescado y marisco Pescamar en Poio, donde, tras recorrer sus instalaciones y conocer de primera mano el trabajo diario de esta empresa, ha subrayado la importancia de "saber adaptarse a los cambios, asumirlos y especializar los contenidos de la labor".
Quintana ha reiterado también su compromiso de trabajar a favor del sector conservero y transformador como parte "fundamental" de la línea de futuro del sector marítimo gallego.
Junto a la gerente de Pescamar, Lupe Murillo, también concejala popular en el Ayuntamiento de Pontevedra, Quintana ha elogiado el trabajo de esta empresa afincada Poio por sus actuaciones en la búsqueda de una "mayor competitividad" mediante la fórmula de innovación y desarrollo.
PLAN ESTRATÉGICO
La responsable de Mar ha recordado que una de las actuaciones más importantes de su departamento ha sido la reactivación del Plan Estratégico de la Conserva, que marcará el "camino a seguir" en el sector transformador en la búsqueda de su viabilidad y equilibrio.
"La intención de esta reorientación de acciones de hacia el 2013 es mantener el liderazgo mundial del sector conservero", ha afirmado. Cabe recordar que la Consellería del Mar busca, a través de este plan, incrementar el valor añadido de la producción, consolidar las estructuras empresariales existentes y la posición de liderazgo en los mercados locales e internacionales.
Este Plan está destinado, ha recordado Quintana, a "un colectivo empresarial en una situación difícil y clave en la cadena mar-industria en Galicia".
El sector gallego representa el 80 por ciento de la producción española, aproximando su volumen de negocio a los 1.000 millones de euros anuales y dando empleo a más de 12.000 personas, de las que cerca del 80 por ciento son mujeres.
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