BRUSELAS, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha anunciado este lunes el lanzamiento en verano de un proyecto piloto para empezar a cooperar con los Gobiernos y las empresas en el desarrollo de una Inteligencia Artificial (IA) ética.
"Se necesitan directrices éticas para el desarrollo y utilización de la IA. La IA sólo se puede considerar fiable si se desarrolla y se utiliza respetando valores étnicos ampliamente compartidos", reza el documento de la Comisión Europea publicado este lunes.
Bruselas ya dio a conocer en diciembre un primer borrador de directrices éticas para promover el desarrollo de la Inteligencia Artificial en Europa elaborado por el grupo de expertos nombrado por la Comisión Europea para asesorarle en este terreno y ha fijado siete criterios "esenciales" para confiar en los sistemas de IA futuros en su documento presentado este lunes.
Así, los sistemas de Inteligencia Artificial deberán fomentar las sociedades equitativas y los Derechos Humanos, así como los cambios sociales positivos como la sostenibilidad y la responsabilidad ecológica y se deberá garantizar su "control humano" y que los algoritmos utilizados sean "seguros, fiables y suficientemente robustos para responder a errores e inconsistencias" durante todo su ciclo de vida, al igual que la privacidad y la protección de los datos, asegurando que los ciudadanos retienen el control de sus datos y que no se utilizan para discriminarles o hacerles daño.
También reclama la trazabilidad de los sistemas y promover su accesibilidad de forma no discriminatoria, lo que requeriría tratar de fomentar un diseño "universal" para tener en cuenta las necesidades de las personas discapacitadas.
La puesta en marcha de mecanismos para garantizar la responsabilidad y rendición de cuentas de los sistemas de IA y sus resultados "anteriores y posteriores" es el séptimo criterio identificado por la Comisión Europea. Ello exigirá identificar y minimizar los impactos negativos potenciales a partir de evaluaciones de riesgo proporcionales y un sistema de rectificación cuando se producen.
Una vez fijados estos siete criterios para garantizar el desarrollo ético de la Inteligencia Artificial, el Ejecutivo comunitario lanzará en verano en proyecto piloto para cooperar con socios para aplicar las directrices éticas. Las compañías y Administraciones públicas ya pueden sumarse desde este lunes a la Alianza Europea para la IA.
"La dimensión ética de la IA no es una característica lujosa o añadida: Necesita ser una parte integral del desarrollo de la AI", insiste el Ejecutivo comunitario.
Bruselas ha avanzado que explorará la contribución de las empresas de terceros países y de las organizaciones internacionales en la fase piloto para probar y validar las directrices éticas y cita entre sus posibles socios internacionales para promover una Inteligencia Artificial ética a Japón, Canadá y Singapur.
El Ejecutivo comunitario lanzará tras el verano redes de excelencia para investigar la Inteligencia Artificial con fondos del programa de ayudas a la investigación Europa 2020, comenzará a crear redes de centros de innovación digitales en manufactura y Big Data y empezará a trabajar en modelos para compartir datos en materia de transporte, salud y manufactura industrial.
La Comisión invertirá 1.500 millones de euros de aquí al 2020 para fomentar la Inteligencia Artificial y confía en que las Administraciones públicas y las empresas movilicen 20.000 millones para ello, al tiempo que ha propuesto destinar 7.000 millones para el próximo presupuesto europeo.
