PARÍS, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
Este lunes comenzó en París el juicio contra el ex dictador panameño Manuel Antonio Noriega, juzgado por utilizar cuentas bancarias francesas para blanquear unos 3 millones de euros en los años ochenta procedentes del cártel colombiano de Medellín, delito por el que ya fue condenado en ausencia por un tribunal francés en 1999 a diez años de prisión.
Noriega, de 76 años, llegó alrededor de las 13.00 horas al Palacio de Justicia de París para iniciar el juicio, que podría culminar el próximo miércoles, aunque la condena será emitida en los próximos meses. Se espera que la pena prolongue su tiempo en la cárcel unos años más, pero esta vez en territorio galo.
El ex gobernante fue extraditado a Francia el pasado 27 de abril desde Miami, donde cumplió en calidad de prisionero de guerra una condena de 17 años, pero tuvo que permanecer otros tres años en la cárcel a la espera de su extradición.
El Gobierno de Ricardo Martinelli inició las gestiones para su extradición a Panamá, donde ha sido condenado a 60 años por crímenes contra los Derechos Humanos, en lo que constituye otro intento tras los reiterados fracasos en sus solicitudes a Washington para llevar al ex dictador a su tierra natal a enfrentarse con la justicia.
Yves Leberquier, abogado francés del ex presidente panameño, anunció que pedirán al Tribunal Correccional "que ponga en libertad a Manuel Noriega" alegando que "es evidente que hay una cuestión política mayor en el caso" contra el ex mandatario desde que tropas estadounidenses que le derrocaron y le arrestaron en 1990.
"La cuestión política continúa con la creación del 'personaje Noriega', gran traficante de cocaína, gran dictador, creación puramente estadounidense", afirmó Leberquier en declaraciones a la BBC.
Noriega ha insistido que el dinero con el que compró los apartamentos de lujo en París provienen de su fortuna personal. Los fiscales franceses, en cambio, creen que el dinero provenía del cártel de Medellín, liderado por el fallecido Pablo Escobar Gaviria, que pagó al ex gobernante para poder pasar toneladas de droga por Panamá.
La defensa ha advertido de las condiciones de salud de Noriega, por lo que ha pedido que se le conceda inmunidad o mantener su estatus de prisionero de guerra, lo cual ha sido rechazado por la justicia francesa.
