ABIYÁN, 8 Feb. (Reuters/EP) -
El ex líder rebelde de Costa de Marfil Guillaume Soro ha dimitido este viernes de su cargo como presidente del Parlamento en lo que se trata de una ruptura con el actual mandatario del país, Alassane Ouattara, y un claro indicio de su intención de presentarse a las elecciones del año que viene a la Presidencia.
Ouattara todavía no ha confirmado si se va a presentar ante la confusión generada por la situación actual del ex presidente y rival, Laurent Gbagbo, que podría regresar al país después de haber sido absuelto podría regresar después de haber sido absuelto por el Tribunal Penal Internacional de La Haya.
Muchos marfileños temen que otra polémica electoral pueda conducir a violencia, como la breve guerra civil que estalló en 2010 cuando Gbagbo, se negó a aceptar su derrota frente a Ouattara. Más de 3.000 personas murieron en ese conflict que remachó una década turbulenta en la que Costa de Marfil, el mayor exportador de cacao del mundo, tiró por tierra años de avance próspero y estable.
Ouattara ha dicho que tiene la intención de entregar el poder a una generación más joven, pero como suele ser habitual, tampoco ha desdeñado seguir atrincherado en el poder argumentando una enmienda constitucional presentada en 2016 que le permitiría expandir su mandato, muy al estilo del ex presidente congoleño Joseph Kabila.
Soro, de 46 años, cuyas fuerzas auparon al poder a Ouattara durante la guerra, mantiene no obstante una incómoda relación con el presidente, que parece favorecer más a su primer ministro, Amadou Gon Coulibaly.
Soro se ha limitado a afirmar que "sacrifica el puesto puesto por la paz de Costa de Marfil". "Me quedaré con vosotros para continuar construyendo una Costa de Marfil rica y próspera", ha añadido, sin dar más detalles.
Los analistas consideran que su juventud, su carisma y su popularidad, en particuilar en el norte del país, le convertirían en un contendiente fuerte, particularmente si puede ganar el respaldo de uno de los principales partidos.
