El Gobierno iraquí pide el fin de una ofensiva turca contra el PKK que se intensifica

Actualizado: domingo, 24 febrero 2008 20:26


ANKARA, 24 Feb. (Reuters/EP) -

Al menos 33 milicianos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán PKK y ocho soldados turcos murieron en los combates de hoy en el norte de Irak, con lo que ya son 112 los guerrilleros fallecidos desde el inicio de la ofensiva turca contra las bases de los separatistas, según Ankara, que reconoce 15 bajas. Sin embargo, fuentes del PKK cifran en 47 el número de militares turcos muertos en los combates. Por otra parte, hoy por vez primera el Gobierno iraquí instó a Turquía a poner fin a su ofensiva "lo antes posible" y a emprender negociaciones para resolver la crisis.

"La persecución en caliente (expresión retórica turca para no hablar de ofensiva) prosigue en tres regiones diferentes (del norte de Irak) y nuestros equipos seguirán con la operación con la misma decisión y heroísmo", explicó el Estado Mayor del Ejército turco en un comunicado en el que hace recuento de las bajas de la misión. El PKK discute estas cifras y sólo admite dos guerrilleros muertos en los combates.

"Los bombardeos continúan por tierra y aire, los combates se han recrudecido", explicó un portavoz militar turco en declaraciones a Reuters.

Además, el PKK pidió hoy un levantamiento generalizado de la población kurda que vive en Turquía y comparó la resistencia al Ejército turco con la que ejercen los insurgentes iraquíes contra las tropas extranjeras presentes en su país.

"Si quieren destruirnos, nuestros jóvenes deben convertir en inhabitables las ciudades (turcas)", afirmó Bahoz Erdal, comandante de las Fuerzas Populares de Defensa, una sección del PKK que cuenta con más de 3.000 efectivos.

"En las grandes ciudades, la juventud kurda debe dar su respuesta a las operaciones militares. La guerrilla kurda no tiene sólo 7.000 o 10.000 (combatientes), sino que tiene cientos de miles. Están en todas partes (...), en todas las ciudades turcas", dijo Erdal.

Un pequeño grupo de jóvenes podría, explicó, prender fuego a cientos de vehículos, por ejemplo. "No estamos contra los turcos, pero esa es la lógica de la guerra", explicó Erdal.

La región del sureste de Turquía, donde la población kurda es mayoritaria, ha vivido algunas protestas violentas, aunque la calma es la tónica general a pesar de los bombardeos y los ataques del Ejército turco contra las bases del PKK en el norte de Irak. Sin embargo, algunas ciudades del oeste de Turquía, Estambul e Izmir incluidas, cuentan con una importante comunidad kurda.

HELICÓPTERO DERRIBADO

Los rebeldes afirmaron hoy haber derribado un helicóptero militar turco durante los enfrentamientos de ayer en el norte de Irak, según informó el responsable de relaciones exteriores del grupo rebelde, Ahmed Danees.

Danees declaró que el ataque tuvo lugar ayer, a las cuatro de la tarde --hora española--, cuando "nuestros luchadores derribaron un helicóptero modelo Cobra".

Ankara reconoce que uno de los helicópteros que participaba en la operación "está inoperativo", pero asegura desconocer aún los motivos.

El Ejército turco utiliza paracaidistas apoyados por fuego de artillería, aviones F-16 y helicópteros Cobra, como el derribado, en las operaciones. Además, ha enviado 25 carros de combate más a la región.

Un alto mando turco reveló a Reuters que en total hay en territorio iraquí dos brigadas que suman unos 8.000 efectivos, mientras que los medios turcos estimaban en 10.000 los militares implicados en la operación. Sin embargo, un responsable de la coalición militar liderada por Estados Unidos presente en Irak estimó en no más de mil los soldados turcos que participan en 'Gunes' --Sol--, nombre dado por Ankara a la ofensiva.

BAGDAD PIDE EL FIN

Ante la intensidad de la ofensiva y los combates, el Gobierno iraquí ha manifestado por primera vez en términos contundentes su deseo de que Turquía retire sus efectivos "lo antes posible". Además, pidió a Ankara emprender negociaciones con Bagdad para resolver la crisis.

"El Gobierno iraquí considera que la acción unilateral del Ejército turco supone una amenaza a la estabilidad de la región y una violación de la soberanía de Irak y pide a Turquía que retire sus tropas de Irak lo antes posible", se lee en un comunicado del Gobierno.

"El Gobierno iraquí pide a Turquía que inicie negociaciones bilaterales con el Gobierno iraquí y considera la amenaza del PKK una amenaza para Turquía y para las zonas fronterizas", agrega.

En respuesta, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, mandará a un enviado especial el próximo miércoles a Bagdad para iniciar conversaciones con el Gobierno de Irak, según informó un portavoz gubernamental iraquí.

"Nuestros hermanos iraquíes deberían saber que esta operación solo pretende limpiar los campamentos terroristas y a los terroristas", indicó.

No son pocas las presiones que deberá soportar el régimen iraquí, en principio dispuesto a permitir las incursiones de un aliado fundamental de Estados Unidos. Ayer mismo, el Gobierno de la región autónoma del Kurdistán iraquí manifestó su preocupación y advirtieron de que si los efectivos turcos dañan zonas pobladas o a civiles la respuesta será una dura resistencia.

Hoy las milicias kurdas iraquíes, los Peshmerga, volvieron a advertir sobre las consecuencias de la permanencia de militares turcos en la región. "Las fuerzas Peshmerga kurdas están en estado de alerta y se defenderán si las fuerzas turcas lanzan una incursión en zonas bajo control del Gobierno regional del Kurdistán", declaró un portavoz Peshmerga, Jabbar Yawar, en declaraciones a Reuters.