MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ONG Human Rights Watch (HRW) ha instado este miércoles a las autoridades de Birmania a liberar inmediatamente a una treintena de musulmanes rohingya que se encuentran detenidos por tratar de viajar desde el estado de Rajine a la ciudad de Rangún.
Según ha denunciado la organización en un comunicado, el Gobierno debe retirar las restricciones al viaje sobre los rohingya, así como "cualquier regulación discriminatoria que limite su derecho a la libertad de movimiento".
"Las autoridades de Birmania parecen seguir persiguiendo a los rohingya tanto si se quedan en casa como si tratan de viajar de forma libre dentro del país", ha aseverado el director de HRW para Asia, Brad Adams. "Estos 30 hombres, mujeres y niños están siendo castigados simplemente por tratar de huir de la brutalidad diaria a la que han sido sometidos durante años", ha expresado.
La Policía los detuvo el pasado 26 de septiembre. Una semana después, un tribunal condenó a 21 de ellos a dos años de prisión y envió a ocho niños a un centro de detención de menores. El más pequeño de todos, de cinco años de edad, se encuentra retenido con su madre en la prisión de Pathein.
Todos ellos habrían sido detenidos por tratar de viajar sin permisos oficiales tras llegar a la región de Ayeyarwady en barco desde la localidad de Sittwe, en Rajine. El grupo pretendía llegar a Rangún, donde querían buscar trabajo o intentar continuar su viaje hacia Malasia.
HRW ha señalado que cerca de 600.000 rohingya siguen en el estado de Rajine sujetos a la persecución y la violencia del Gobierno dos años después de que una campaña militar de "limpieza étnica" forzara a 740.000 de ellos a huir a Bangladesh. Aquellos que continúan en Birmania están atrapados en terribles condiciones, confinados en campos sin libertad de movimiento.
"Es una cruel ironía que estos rohingya intercambien lo que suponía un confinamiento al aire libre en Rajine por un confinamiento en una prisión en Pathein", ha aseverado Adams, que ha asegurado que su "encarcelamiento supone un claro signo para Naciones Unidas y los gobiernos extranjeros que alientan el regreso de los refugiados rohingya de Bangladesh a Birmania".
"No tienen un verdadero interés en otorgar a la población rohingya libertades fundamentales", ha concluido. La ONG ha incidido en que las restricciones del Gobierno birmano sobre los rohingya violan el Derecho Internacional, que garantiza el derecho a la libertad de movimiento dentro del país.
