WASHINGTON, 23 Dic. (Reuters/EP) -
Mick Mulvaney, director de la Oficina de Gestión y Presupuestos y jefe de Gabinete en funciones del presidente estadounidense, Donald Trump, ha reconocido este domingo que la paralización del Gobierno que ha dejado sin financiación a una cuarta parte de las instituciones federales podría durar hasta el 3 de enero, fecha en la que se reúne por primera vez el Congreso renovado, ya con mayoría del Partido Demócrata en la Cámara de Representantes.
"Es muy posible que esta paralización se prolongue más allá del 28 y hasta el nuevo Congreso", ha afirmado Mick Mulvaney en declaraciones a la cadena Fox News. "No creo que podamos avanzar muy rápido en los próximos días" debido a las fiestas navideñas, ha explicado Mulvaney.
Mulvaney ha responsabilizado del bloqueo a la candidata demócrata a presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. "Creo que está en un posición muy negativa, atrincherada en la izquierda y sin que la puedan ver pactando nada con el presidente hasta que sea presidenta de la Cámara de Representates. Si es así, es posible que lleguemos al próximo Congreso", ha indicado.
La Casa Blanca ha planteado una "contraoferta" para seguridad fronteriza a los demócratas situada a medio camino de la propuesta demócrata de 1.300 millones de dólares y la petición de Trump de 5.000 millones, ha explicado Mulvaney.
Fuentes citadas por la cadena ABC informaron el sábado de que el vicepresidente, Mike Pence, ofreció renunciar a los 5.000 millones del muro fronterizo y aceptar 2.100 millones.
Mulvaney ocupa de forma interina desde hace diez días el cargo de jefe de Gabinete, puesto ocupado anteriormente por John Kelly y Reince Priebus.
A medianoche del sábado expiraron las siete leyes que garantizaban el funcionamiento de una serie de entidades públicas. De acuerdo con la legislación, el Departamento de Estado, el de Justicia, de Agricultura, de Transporte, y algunos otros deben reducir significativamente su trabajo y dar vacaciones forzadas a algunos de los empleados hasta que se logre un acuerdo.
El conflicto ha surgido cuando Trump ha intentado incluir en la tramitación parlamentaria un presupuesto millonario para la construcción de un muro fronterizo en México, promesa estrella de su campaña electoral, pero los demócratas han impedido su inclusión. Parecía que ambos partidos tenían un acuerdo para aprobar el gasto con una partida reducida para seguridad fronteriza, pero Trump, presionado por el ala más conservadora, rechazó la propuesta e insistió en su petición de 5.000 millones de dólares para la valla.
