MADRID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
Unos 150 miembros del Estado Islámico han muerto en la ofensiva de las fuerzas gubernamentales afganas apoyadas por efectivos extranjeros sobre la base de los yihadistas en la localidad de Gorgori, en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán.
La ofensiva sobre Gorgori comenzó hace diez días, ha explicado este sábado un portavoz de las fuerzas especiales del Ejército afgano identificado como Mujtaba en declaraciones a la cadena de televisión afgana Tolo News. "Tenían campamentos de entrenamientos. Aquí decapitaron a ocho miembros de la Fuerza de Fronteras. Aún podría haber minas", ha explicado Mujtaba.
Desde allí, los milicianos preparaban atentados contra Kabul y otros lugares del país. La operación aún continúa abierta, ha apuntado otra fuente. "Quedan aún tres o cuatro pueblos que no han sido liberados del Estado Islámico y un importante número de combatientes han huido hacia otros puntos de la Línea Durand", la frontera afgano paquistaní, ha indicado un responsable policial, Sardar.
La ofensiva ha contado con el apoyo aéreo de efectivos extranjeros. Un general estadounidense, John Brennan, responsable de la misión de formación de Apoyo Decidido para el este del país, ha destacado que desde allí "planeaban y perpetraban atentados en Kabul y Jalalabad".
