GINEBRA, 9 Dic. (Reuters/EP) -
El Comité de la ONU contra la Tortura ha instado este miércoles a China a detener la tortura de detenidos que, según ha dicho, sigue siendo generalizada en comisarías de Policía y cárceles, y a cerrar sus "prisiones negras" secretas.
El organismo de Naciones Unidas ha manifestado profundas preocupaciones sobre la muerte bajo custodia de varios prisioneros políticos de alto perfil y por la represión de China a los abogados. Al menos 25 de 200 abogados detenidos desde julio aún están privados de libertad, ha sostenido.
Los 10 expertos independientes han pedido a Pekín que informe de vuelta en un año sobre el avance en el cumplimiento de un tratado internacional que prohíbe la tortura. Sus recomendaciones han sido emitidas tras examinar el historial chino en una audiencia de dos días el mes pasado, la primera revisión desde 2008.
"El comité continúa seriamente preocupado por informaciones consistentes que indican que la práctica de la tortura y el maltrato están profundamente enraizadas en el sistema de justicia criminal, que depende demasiado de confesiones como base de las condenas", sostuvo el comité.
En Pekín, la portavoz del Ministerio de Exteriores Hua Chunying ha dicho que no había visto el informe. "Pero en los últimos años, China ha estado promoviendo el imperio de la ley y ha hecho grandes esfuerzos en todos los frentes, incluyendo la oposición a la tortura", ha aseverado en una rueda de prensa diaria y antes de la publicación del informe.
La agencia de la ONU ha dicho que tiene varias informaciones creíbles que "documentan en detalle casos de tortura, muertes bajo custodia, detenciones arbitrarias y desapariciones de tibetanos".
Activistas de Derechos Humanos, abogados, demandantes, disidentes políticos y miembros de minorías religiosas o étnicas "siguen siendo acusados, o amenazados de ser acusados, con delitos definidos ampliamente como forma de intimidación", ha sostenido el comité, citando cargos como poner en peligro a la seguridad nacional y terrorismo.
