AMÁN, 17 Dic. (Reuters/EP) -
Los rebeldes sirios han acusado a las milicias chiíes respaldadas por Irán de bloquear el acuerdo para la evacuación de los miles de civiles que todavía quedan en el antiguo bastión rebelde de Alepo oriental.
El jefe del ala política del grupo rebelde Ahrar al Sham, involucrado en las negociaciones de evacuación, ha acusado a Irán de paralizar la salida de los civiles a expensas de que se permita la salida de dos localidades de mayoría chií bajo asedio rebelde.
"Irán y sus aliados sectarios se están aprovechando de la situación humanitaria en Alepo para impedir a los civiles que salgan hasta que se complete la evacuación de su gente en Fua y Kefraya", ha acusado Munir al Sayal.
La situación en estas dos localidades es ahora mismo confusa. El partido-milicia chií libanés Hezbolá --que combate junto al régimen sirio-- ha indicado que los autobuses en los que se desalojará a la población civil atrapada en Fua y Kefraya, unas 4.000 personas, han salido ya de Alepo.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos --con sede en Londres pero una gran red de informantes sobre el terreno-- ha confirmado esta información y ha añadido que también han comenzado los preparativos para evacuar Madaya.
Sin embargo, el Observatorio ha denunciado nuevos problemas en Alepo. Al parecer, grupos armados afines al Gobierno han atacado un convoy y han insultado a los civiles que viajaban en él, tras lo cual se ha desatado un enfrentamiento que se ha saldado con dos combatientes muertos.
