UE.- Reino Unido, Alemania y Suecia amenazan la aprobación en plazo del supervisor bancario único

Actualizado: viernes, 30 noviembre 2012 16:07

Los líderes europeos se comprometieron a que estuviera listo antes de que acabe el año


BRUSELAS, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -

Las reservas de Reino Unido, Alemania y Suecia amenazan con impedir la aprobación en el Ecofin del 4 de diciembre de la norma que encomienda al Banco Central Europeo (BCE) la supervisión de todas las entidades de la eurozona, según han informado este viernes fuentes diplomáticas.

El acuerdo es prioritario para España ya que se trata de la condición previa para que el fondo de rescate de la UE (MEDE) pueda recapitalizar directamente a la banca.

La falta de consenso hará difícil cumplir el calendario decidido por los líderes europeos de alcanzar un acuerdo antes de fin de año, aunque la cuestión podría debatirse de nuevo en el Consejo Europeo del 13 y 14 de diciembre, según las fuentes consultadas.

El primer obstáculo que dificulta el acuerdo es cómo separar la política monetaria de la nueva función de supervisión y cómo facilitar la participación en el supervisor único de los países de fuera de la eurozona. La propuesta de compromiso sobre la mesa prevé crear un nuevo consejo de supervisión en el seno del BCE en el que cada país tendrá el mismo peso.

Una vez que el consejo supervisor haya adoptado un compromiso, lo trasladará al consejo de gobierno del BCE, en el que sólo están los países de la eurozona, que lo aprobará en quince días por procedimiento de silencio administrativo. En caso de oponerse, los países de fuera del euro podrán renunciar a aplicar la decisión.

Suecia, Alemania y Austria cuestionan que el consejo supervisor esté supeditado al consejo de gobierno y plantean una reforma del Tratado, ya que éste establece que el consejo de gobierno y el comité ejecutivo del BCE son los únicos órganos facultados para adoptar soluciones.

En segundo lugar, aunque hay casi consenso en que el BCE debe tener la "última palabra" en el control de los 6.000 bancos de la eurozona, Berlín todavía plantea reservas y pide excluir a las entidades más pequeñas. El resto de países se opone alegando que ello crearía un sistema "a dos velocidades" en el que los bancos que no participan quedarán automáticamente expulsados del mercado interbancario para financiarse.

El tercer problema es la reforma de la Autoridad Bancaria Europea, que seguirá siendo la responsable de elaborar los estándares técnicos para la banca. Reino Unido teme quedar siempre en minoría en este órgano, que decide por mayoría cualificada, si los países de la eurozona y los que participan en el supervisor único se alían.

Por ello, Londres -junto con otros países de fuera del euro- exige aumentar su poder en la Autoridad Bancaria frente a los países de la eurozona. Pero estos se niegan alegando que ello supondría darle un peso excesivo que le permitiría bloquear cualquier decisión.