Aduanas intervino en 3.084 operaciones para incautar material falsificado en 2009, un 9,1% menos que en 2008

MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

Aduanas ha intervenido en un total de 3.084 operaciones para incautar material falsificado en 2009, lo que supone un 9,1 por ciento menos que el año anterior, según ha informado la Cámara de Comercio de Madrid durante las jornadas 'Seguridad y legalidad en el comercio internacional: opciones a disposición de la empresa'.

De esta forma, el Ejecutivo comunitario atribuye este descenso, el primero que se produce en los últimos años y que se ha registrado igualmente en el conjunto de la Unión Europea, a la crisis económica. En estas operaciones se incautaron de 4,3 millones de artículos, frente a 26,5 millones en 2008.

En este sentido, jefa de la Dependencia Provincial de Aduanas, María Teresa Ibáñez ha afirmado que "el rey absoluto de las falsificaciones de marcas que entran en España en la actualidad es Bob Esponja". "Este personaje se ha unido a otras dos marcas tradicionales en las falsificaciones que se dirigen al mercado español: Tous y Carolina Herrera", ha precisado.

Además, Ibáñez ha reconocido que "el mayor volumen de mercancías retenidas en Aduanas procede de China, que fundamentalmente son gafas, bolsos y otros complementos".

Cuando en Aduanas sospechan de la procedencia de la mercancía, la retienen y notifican de ello por fax al titular de la marca en cuestión, que tiene un plazo de 10 días para reconocer la autenticidad o no de la mercancía. Este plazo se reduce a 3 días cuando la mercancía es perecedera, como ocurre con las flores naturales.

El objetivo de estas jornadas para la Cámara de Comercio es poner al alcance de las empresas madrileñas las herramientas necesarias para que puedan definir y apurar su estrategia a fin de asegurar sus transacciones internacionales.

Dicha estrategia se centra en la gestión óptima de los documentos contractuales que establecen estas operaciones, y de su cartera de propiedad industrial; y abarca también la posibilidad acceder a la condición de Operador Económico Autorizado, con las consiguientes ventajas derivadas de la misma en un entorno aduanero marcado por procedimientos de control cada vez más estrictos.

Por su parte, el director general de la Asociación Nacional para la Defensa de la Marca (Andema), José Antonio Moreno, ha puesto de relieve durante su intervención "la escasez de marcas españolas reconocidas internacionalmente", si bien ha señalado que "las empresas españolas han realizado un esfuerzo considerable en los últimos 30 años".

Moreno ha considerado que la falta de un "capital comercial notorio, junto con los déficits de inversión en innovación y de soporte institucional a la internacionalización son los tres factores fundamentales a los que cabe atribuir el retraso del proceso de internacionalización en España con respecto a los países de su entorno".

Además, ha puesto el acento "en la importancia de registrar la propiedad industrial de una compañía por los cauces adecuados para protegerla en todos aquellos países en los que la compañía tiene presencia o desea tenerla".

La Oficina Española de Patentes y Marcas registra 40.000 marcas al año, según los datos de Andema. Registrar en España una marca cuesta unos 150 euros, mientras que una patente puede alcanzar 2.500 euros. "La marca registrada en España, si no se registra a nivel comunitario o internacional sólo tiene protección en el territorio nacional", ha destacado Andema.

Por otra parte, los abogados del despacho Uría Menéndez Julio López-Quiroga y Miguel Fraga Otero han detallado los aspectos que debe tener controlados cualquier empresa a la hora de realizar operaciones de comercio exterior. "El contrato de compraventa es el contrato marco de la operación, si bien forma un triángulo con los contratos de transporte, seguro y de medios de pago", ha explicado López-Quiroga, que ha incidido en el ascenso de los riesgos de impago en el mundo debido a la actual coyuntura económica.

Por otra parte, el director ejecutivo de Ventas Internacionales de SGS España, Juan Manuel García Macías, ha considerado "fundamental huir de las gangas, porque nunca lo son; establecer relaciones de confianza y de continuidad con el proveedor; pagar mediante carta de crédito y rechazar pagos por adelantado o sistemas de pago inmediatos sujetos a ejecutarse antes de la entrega de la mercancía; y calibrar las consecuencias cada vez mayores de recibir una mercancía defectuosa".

En este sentido, para asegurar la confianza en las transacciones internacionales que se efectúan on-line, la Cámara de Comercio pone a disposición de las empresas madrileñas el sistema de certificación digital y firma electrónica de Camerfirma, así como el sello ChamberTrust. Este sello garantiza que la empresa existe, que la dirección de Internet pertenece a la empresa y que los productos y/o servicios que comercializa son los que muestra en su web.