MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Vicerrectorado de Tecnología y Sostenibilidad de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), en coordinación con la gerencia de la universidad, ha dado instrucciones de eliminar los adaptadores de corriente que tienen todos los teléfonos de sobremesa.
Con esta medida, según explica la institución en un comunicado, se espera reducir la generación de residuos electrónicos y disminuir la cantidad de cables que hay en los despachos y la ocupación de enchufes.
Según el informe de 2017 del Observatorio mundial de los residuos electrónicos, cada año se fabrican más de un millón de toneladas de fuentes de alimentación externas, como los adaptadores anteriormente citados.
Para contribuir a su reducción, los Servicios Informáticos y la Dirección de Obras y Mantenimiento de la UCM están realizando los cambios técnicos apropiados para que todo lo necesario, datos y electricidad, viaje por el mismo cable de red. Esta tecnología se denomina POE (Power over Ethernet).
Ello supondrá una "mejora de calidad" en las llamadas, al reducir los ruidos de línea. También se espera, igualmente, una reducción de consumo energético, ya que los adaptadores son "más ineficientes que el nuevo sistema". Además, la Complutense asegura que permitirá reducir el mantenimiento, puesto que muchas intervenciones están relacionadas con el reemplazo de los adaptadores.
Esta medida, se acometió ya en la Facultad de Matemáticas y en el Centro de Proceso de Datos. El actual equipo de gobierno ha recuperado esta iniciativa y ha conseguido implantarla en las Facultades de Biológicas, Geológicas, Físicas e Informática.
A partir del 28 de octubre, comenzará la renovación en la Faculta de Psicología y, desde el 4 de noviembre, en el edificio del Jardín Botánico y seguirá por el resto de la UCM, según se vayan activando los medios técnicos en cada centro.
