MADRID, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Penal número 10 de Madrid ha condenado a una multa de 1.804 euros a cada uno de las cuatro personas juzgadas por querer vender los cinco cuadros de Francis Bacon que fueron robados, junto a joyas y otros objetos personales, por otros individuos en junio de 2015 de una casa señorial de la capital.
El robo se produjo cuando el dueño de las pinturas se encontraba de viaje fuera de su domicilio y al regresar comprobó lo ocurrido, por lo que puso una denuncia en la Comisaría de Centro de la Policía Nacional de Madrid.
En febrero de este 2016, una empresa privada de investigación avisó a la Policía de que había recibido fotografías inéditas de las obras que habrían sido realizadas posteriormente al robo con una cámara digital alquilada por una persona con domicilio en la localidad barcelonesa de Sitges.
Gracias a esta información, los agentes localizaron al autor de las imágenes quien resultó ser uno de los presuntos responsables materiales del robo y fue detenido junto a otro de los presuntos ladrones.
Además de estas dos personas, fueron arrestadas un marchante de arte de Madrid y su hijo, que son quienes hicieron saltar la alarma en la empresa privada de investigación al enviar las imágenes para consultar si las obras que aparecían en ellas figuraban como robadas. Estos dos últimos detenidos habrían recibido las imágenes realizadas por los autores materiales del robo como parte de una negociación para vender las obras robadas y han sido detenidos como presuntos encubridores de los hechos junto a otras tres personas, según las mismas fuentes.
Entonces, la Policía registró el domicilio del arrendatario de la cámara fotográfica y de los presuntos encubridores del robo sin hallar los efectos robados, aunque sí se incautaron de seis teléfonos móviles y tres ordenadores para registrar sus datos en busca de indicios sobre la posible localización del material desaparecido.
En verano de 2017 los agentes recuperaron finalmente tres de los cinco cuadros de Francis Bacon sustraídos. Se trata de cuatro retratos y un autorretrato valorado en 25 millones de euros.
El Juzgado del que ahora se conoce la sentencia se trata de que ha juzgado, por un delito de receptación, al marchante de arte y otros tres individuos personas que quisieron vender varios de los cuadros robados. Se trata de Cristóbal G.C, Alfredo Cristian F.G., Ricardo B.H. y Rubén S.H.
El magistrado estima, según el fallo al que ha tenido acceso Europa Press, como probados estos hechos y les condena a una pena de 15 meses y un día de prisión, que por conformidad con todas las partes ha sido sustituida para cada una por una multa de 4 euros por día de esa condena.
