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MADRID, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, Antonio Beteta, ha visitado este martes el tramo de la carretera M-209 comprendido entre Arganda del Rey y Campo Real en el que han quedado eliminados dos puntos negros con una obra que se ha desarrollado en cuatro meses y que ha supuesto 1,5 millones de euros.
Esta carretera presenta una intensidad media diaria de circulación de más de 12.000 vehículos de los que casi uno de cada 10 son pesados, algo que ha sido destacado por el consejero, que también ha puesto el acento en los 55.000 vecinos de ambas localidades que se beneficiarán directamente de esta mejora.
Las actuaciones se han dividido en dos tramos: el primero, entre los kilómetros 1 y 2 de dicha vía; el segundo, entre los puntos kilométricos 3 y 4. Las obras han consistido en una mejora del trazado de las curvas, así como en la construcción de nuevo firme, que está compuesto por 25 centímetros de mezclas bituminosas en caliente y otros 25 de zahorra artificial.
El proyecto que hoy ha visitado el consejero también ha incluido la mejora del trazado actual así como de su señalización y el balizamiento de todo el tramo para incrementar la seguridad de la circulación.
"A pesar de todas las mejoras, en última instancia, la seguridad en la carretera depende de los ciudadanos", ha remarcado Beteta, que ha reconocido el "esfuerzo" de los madrileños "por conducir de forma adecuada a las características de la vía por la que transitan a cada momento, lo que se refleja en la bajada, año tras año, de las cifras de siniestralidad en Madrid".
Por su parte, la alcaldesa de Campo Real, Concepción Guerra, ha hecho hincapié en su "agradecimiento" por la eliminación de estos dos puntos negros y de las anteriores obras realizadas. "La Consejería ha trabajado un montón en estos años", ha reconocido, si bien ha advertido al nuevo consejero que va a estar con él "todos los días" porque "hay muchas cosas que hacer" en la localidad.
