El Supremo avala el currículo de Primaria de la Comunidad recurrido por el Ministerio al opinar que infringía la LOE

Actualizado: lunes, 2 agosto 2010 14:57

Educación denunció ausencias sobre igualdad de sexos, discriminación, capacidades afectivas y resolución pacífica de conflictos

MADRID, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Supremo ha rechazado un recurso de casación interpuesto por el Ministerio de Educación contra el currículo de Educación Primaria de la Comunidad de Madrid aprobado en el año 2007, y que, a juicio del Gobierno central, infringía la Ley Orgánica de Educación (LOE).

En su sentencia, con fecha del pasado 5 de julio, recogida por Europa Press, el Supremo recalca que no hay lugar al recurso de casación, puesto que el currículo de la Comunidad no lesiona la LOE, ratificando de esta manera el fallo en el mismo sentido del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).

El Alto Tribunal madrileño, en octubre de 2008, desestimó las alegaciones del Ministerio de Educación señalando que de la lectura del currículo se desprende "el cumplimiento con creces de los parámetros que, como enseñanzas obligatorias mínimas y para esta etapa educativa, marca la normativa vigente", recuerda el Gobierno regional.

El Ministerio de Educación alegaba, en primer lugar, un defecto de forma en la normativa madrileña al carecer de un dictamen del Consejo de Estado. Sin embargo, tanto el TSJM como el Supremo han considerado que ese dictamen no es necesario.

También denunciaba algunas ausencias en el currículum respecto a la normativa estatal, en ámbitos como la igualdad de sexos, el rechazo de estereotipos sexistas y de todo tipo de discriminación, el desarrollo de capacidades afectivas y la resolución pacífica de conflictos.

En este punto, el Tribunal Supremo señala que aunque "los términos utilizados por la disposición reglamentaria autonómica no constituyen una reproducción mimética de las normas estatales", ello no impide entender que la norma "refleja los objetivos marcados por la normativa estatal" en estos ámbitos en orden a la formación en determinados valores de convivencia. "Lo importante es que se respetan esos objetivos independientemente de cómo vengan expresados", añade.

El Ministerio de Educación apreciaba también deficiencias del currículo madrileño en los contenidos de matemáticas, concretamente en el apartado de la normativa regional que dejaba en manos del maestro la decisión del uso de la calculadora para resolver los ejercicios de cálculo, algo que no establecía el Real Decreto del Gobierno central.

Sin embargo, en su recurso ante el Supremo, el Ministerio ha decidido omitir esta alegación. Esta omisión es, a juicio del alto Tribunal, la única diferencia entre el recurso actual y el que ya rechazó el TSJM en su momento. "El motivo insiste en reiterar posiciones con escasa crítica jurídica de la sentencia que analiza los argumentos", apunta.