Se ha hecho con criterios ambientales, entre ellos respeto a ejemplares arbóreos, el uso de acequias antiguas o la restauración vegetal
MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Fuentidueña de Tajo han colaborado para poner en marcha un proceso de concentración parcelaria que ha reducido la dispersión de los terrenos de cada propietario, incluyéndolos en una misma explotación.
Con ello quieren facilitar la labor de los agricultores en la zona de La Poveda, alertados en la última década por el elevado coste energético del riego y la necesidad de mejorar la eficiencia de riesgo y optar a cultivos más rentables.
Por ello, ha concluido un proceso de concentración parcelaria que ha durado ocho años y que conlleva, según han indicado a Europa Press fuentes de la Consejería de Medio Ambiente y Agricultura, un aumento de la rentabilidad, una mejora de los accesos a las fincas y, por otro lado, preservar el paisaje y las vías pecuarias. Además, en una segunda fase, se realizará la modernización del regadío.
La inversión se ha realizado con fondos europeos, gracias Programa de Desarrollo Rural 2014-2022, cofinanciado con fondos FEADER y ha supuesto un total de 578.790 euros.
TRABAJOS RESPETUOSOS CON EL ENTORNO NATURAL
La zona regable está ubicada en la margen izquierda del río Tajo a su paso por Fuentidueña y posee una superficie productiva de 144 hectáreas, que pertenecen a 86 propietarios. Es un espacio de alto valor ecológico global, incluido en la Zona de Especial Conservación de las Vegas, cuestas y páramos del sureste de Madrid, por lo se ha garantizado la protección del corredor de ribera y la conservación de los elementos naturales existentes, con la realización previa de un estudio de impacto ambiental.
Con estas prevenciones, el departamento que dirige Carlos Novillo ha desarrollado el proyecto de la nueva red viaria y el acceso a las fincas de reemplazo con criterios medioambientales "muy sensibles", entre los que se encuentran el respeto a los ejemplares arbóreos, el uso de acequias antiguas, la eliminación de trazados de caminos antiguos y su restauración con tierra vegetal, así como el uso de los materiales eliminados para rellenar otros espacios.
También la reutilización in situ del hormigón extraído de la antigua red de riego (minimizando el uso de camiones que se habrían utilizado para su transporte al vertedero) o el aprovechamiento de la tierra vegetal que ha resultado de las nuevas trazas como relleno de los caminos antiguos.
Además, se han seguido las directrices de la Comunidad de Regantes en cuanto a la anchura necesaria en las calzadas y el diseño hidráulico, y se han preparado pasos salvacunetas para acceder a las fincas. Por otra parte, se han incluido medidas de restauración ambiental como plantaciones de ejemplares autóctonos y creado una charca de anfibios en el Descansadero del Remanso de la Tejera.
ENTREGA DE OBRAS AL AYUNTAMIENTO DE FUENTIDUEÑA DE TAJO
Una vez terminadas las obras y realizado el mantenimiento necesario, se ha entregado al Ayuntamiento de Fuentidueña de Tajo para su mantenimiento y custodia (excepto el camino de servicio de la A-3 y el camino del Remanso de la Tejera, por ser una vía pecuaria).
Asimismo, se han entregado al Ayuntamiento los títulos de propiedad de las tierras sobrantes, a las que se denominan masas comunes, que no se adjudican a ningún propietario. Y a sus responsables los títulos de propiedad de las parcelas en las que se instalará la red de riego, para la que ya se había reservado una banda de tres metros adyacente a los nuevos caminos rurales, con una longitud de 6.941 metros, 7 metros de anchura de firme y plantaciones de árboles y arbustos autóctonos en los espacios libres. Y nuevas denominaciones para los nuevos caminos, basadas en los usos y costumbres de la zona.
El Ejecutivo regional va a destinar 2,7 millones para la modernización del regadío, que va a iniciarse en breve y a maximizar la rentabilidad con el ahorro de agua al evitar las pérdidas en distribución y la mayor eficiencia del riego del 50% de la red, al mejorar más de un 80% de los sistemas de aspersión y goteo. El proyecto incluye habilitar una planta fotovoltaica para el suministro de la energía necesaria para el telecontrol de la red.
