TOKIO, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
El grupo automovilístico japonés Toyota obtuvo un beneficio neto de 548.200 millones de yenes (unos 5.300 millones de euros al cambio actual) en el primer semestre de su año fiscal 2012-2013 (abril-septiembre) lo que supone multiplicar casi por siete las ganancias registradas en el mismo período del ejercicio anterior.
Este fuerte incremento del beneficio se debe a que los resultados del año fiscal anterior recogían el impacto del terremoto y del tsunami del 11 de marzo en Japón, que obligó a para las fábricas y redujo considerablemente las ventas.
La cifra de negocio de Toyota se elevó a 10,9 billones de yenes (105.263 millones de euros) entre los pasados meses de abril y septiembre, lo que se traduce en una progresión del 36,1% en comparación con el mismo período del ejercicio precedente.
Toyota comercializó en todo el mundo 4,51 millones de vehículos en los seis primeros meses del año fiscal 2012-2013, lo que representa un fuerte incremento del 49,2% en relación con el primer semestre del ejercicio fiscal previo.
En Europa, la multinacional nipona alcanzó unas ventas de 412.000 unidades, con un crecimiento del 14,1%, en contraste con la caída del conjunto del mercado. Sin embargo, su beneficio operativo bajó un 13,9%, hasta 12.000 millones de yenes (116 millones de euros).
REVISIÓN DE PREVISIONES.
La corporación ha revisado a la baja en 50.000 coches sus previsiones de ventas para el conjunto del año fiscal, hasta situarlo en 8,75 millones de unidades, como consecuencia de las incertidumbres generadas en China y por la situación del mercado europeo.
En cambio, la empresa revisa al alza sus estimaciones financieras para el conjunto del año fiscal 2012-2013, que concluirá el próximo 31 de marzo, en el que espera obtener una cifra de negocio de 21,3 billones de yenes (205.700 millones de euros) y un beneficio neto de 780.000 millones de yenes (7.530 millones de euros).
