AZPEITIA (GUIPUZCOA), 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
Familiares, amigos, vecinos y proveedores de la empresa Altuna y Uria, entre otros, se fueron acercando a lo largo de esta mañana a la capilla ardiente del empresario asesinado por ETA Inaxio Uria, para darle el último adiós y mostrar su apoyo a la familia.
La capilla ardiente, situada en el tanatorio Carmona de la localidad guipuzcoana, quedó abierta al público de nuevo a las nueve de la mañana y, por ella, pasaron, sobre todo, familiares de Uria o vecinos de la localidad, así como personas relacionadas con la empresa, que hoy permanece cerrada.
El féretro con los restos mortales de Inaxio Uria permanecerá en el tanatorio hasta las siete y media de esta tarde, hora en que será trasladado a la parroquia San Sebastián de Soreasu, donde el obispo de la capital guipuzcoana, Juan María Uriarte, presidirá el funeral.
Los vecinos y familiares toman el relevo hoy de los representantes políticos e institucionales que visitaron ayer a la familia para mostrarles sus condolencias, y es probable que no se acerquen hasta la tarde a la localidad guipuzcoana para asistir al acto religioso y a la posterior manifestación convocada por Gobierno vasco, Diputación de Gipuzkoa, Adegi y Confebask.
El presidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el presidente del PP, Mariano Rajoy, acudieron juntos a primera hora de la tarde de ayer a la capilla ardiente en Azpeitia.
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