El Gobierno de Cospedal ve las manifestaciones como "una clara campaña de tensión en la calle auspiciada por el PSOE"

TOLEDO 1 Mar. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Leandro Esteba, ha asegurado que las manifestaciones convocadas ayer por varios sindicatos en defensa de lo público en la región son "una clara campaña de tensión en la calle auspiciada por el PSOE".

"Creo que asistimos completamente absortos y anonadados a una clara campaña de tensión en la calle auspiciada sin ninguna duda por el Partido Socialista", ha apuntado Esteban a preguntas de los medios durante la rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno.

Según ha dicho, ha sido el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y sus "delfines territoriales" quienes han dicho que "no iban a escatimar medios y acciones en relación con las medidas tanto del Gobierno de España como de Castilla-La Mancha".

"Tensionar es justamente lo contrario de lo que necesita este país y esta región", ha apuntado Esteban, quien ha añadido que ahora "no puede venir a pedir explicaciones quien hace unos meses era responsable de la situación que hoy afrontamos".

También se ha referido Esteban a los actos vandálicos que sufrió ayer la sede del PP en Cuenca, afirmando que el Gobierno regional rechaza cualquier fórmula de violencia que aparezca "bajo la manifestación que sea" y ha apelado a la cordura de "quienes están instigando por detrás".

"PERMANENTE" CONTACTO CON SINDICATOS

De otro lado, ha asegurado que el Gobierno de Castilla-La Mancha ha estado "permanentemente" en contacto con los sindicatos que han querido mantener contactos "directos, fluidos y sinceros" con la Administración regional.

"La vocación del Gobierno regional es estar en permanente contacto y diálogo con los representantes de los trabajadores, a pesar de que algunos representantes de los trabajadores de algún sindicato muy concreto tengan una especie de manía persecutoria", ha argumentado.

A preguntas los medios sobre a qué sindicato se refería, ha explicado que no se refiere a "ningún sindicato concreto" y que con sus palabras está definiendo la actitud de "algún dirigente sindical". No obstante, ha dejado claro que el respeto del Gobierno de Castilla-La Mancha por las organizaciones sindicales "es absoluto y sagrado".

Según ha señalado, el Gobierno parte de una situación "muy conocida" por los ciudadanos, quienes tienen "una concepción muy clara" de las medidas que el Gobierno está tomando, por lo que ha pedido "altura de miras" en los planteamientos porque el Gobierno regional es "rehén" de una situación heredada a la que está haciendo frente "de manera decidida".