Crónica resumen.- Los sanfermines recuerdan en su séptima jornada a los mayores

Actualizado: miércoles, 12 julio 2006 18:16

Los toros de Alcurrucén protagonizaron otro encierro rápido y limpio

PAMPLONA, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -

La séptima jornada de las fiestas de San Fermín recordó hoy a los mayores de la ciudad con una misa y una recepción de la alcaldesa Yolanda Barcina a los centenarios. El día comenzó con el encierro, con toros de la ganadería cacereña de Alcurrucén, que protagonizaron una carrera limpia y rápida.

El programa oficial de fiestas dedicó este séptimo día de los sanfermines a los mayores. A las doce del mediodía, Yolanda Barcina recibió esta mañana a dos de las personas que han un cumplido cien años entre julio de 2005 y julio de 2006, y aprovechó la ocasión para reconocer a los mayores de la ciudad que han contribuido al desarrollo de Pamplona.

Justa Ilundáin Biurrun y Nati Cordero Romero, coincidiendo con el Día del Mayor, recibieron el homenaje de la Casa Consistorial por su cien cumpleaños. El tercer homenajeado, Benjamín Arca Rodríguez, finalmente, no pudo asistir.

Yolanda Barcina destacó de los centenarios "la alegría que nos transmiten a todos los pamploneses por ese ejemplo de vida que ha podido comprobar cómo la ciudad de Pamplona se ha transformado en estos cien años, y ellos mismos han contribuido a hacer la Pamplona que hoy es". También valoró cómo cada año "tenemos la gran suerte de tener a más personas que llegan al centenario, lo que es un reflejo de la calidad de vida que tenemos en nuestra ciudad".

Además, en el caso de Nati Cordero, abuela del periodista pamplonés Javier Solano, Barcina destacó que "es muy bonito tener un nieto que es la voz de los encierros". "Estáis contribuyendo vosotras mismas o a través de vuestros familiares a hacer la Pamplona de este siglo", señaló.

Justa Ilundáin, por su parte, se mostró muy animada y "agradecida" por el reconocimiento. "Me encuentro perfectamente, dentro de lo que cabe; he trabajado toda mi vida y desde los diez años". "Los tiempos han cambiado, ahora hay mucha más aglomeración, pero me sigo emocionando con las fiestas de San Fermín, sobre todo, con los encierros", añadió Ilundáin.

Al final del acto, la alcaldesa entregó a las dos homenajeadas un pañuelico, un ramo de flores blancas y rojas y un San Fermín de cristal. Después, un grupo de joteros, con panderetas y acordeones, les dedicaron unas cuentas jotas.

Los mayores comenzaron su día con la celebración de la misa en la iglesia de San Lorenzo, tras la que desfilaron hasta el centro de la ciudad. A continuación, los mayores pudieron disfrutar de un concierto especial en el Paseo de Sarasate con las Rondallas Yoar y Jus la Rocha.

EN EL ENCIERRO

El sexto encierro de San Fermín, con toros de Alcurrucén, fue rápido y limpio, y contó con una afluencia menor de corredores respecto a los días precedentes, lo que permitió a los mozos protagonizar bonitas carreras delante de los astados. No hubo heridos por asta.

Los seis toros concluyeron su carrera en 2 minutos y 15 segundos (los cabestros llegaron 12 segundos más tarde) sin dejar heridos por asta en la calle, según las primeras informaciones. Sí se registraron, en cambio, numerosas caídas de corredores delante de la camada, por el fuerte ritmo que siguieron los animales.

La carrera comenzó puntual, a las ocho de la mañana, bajo cielo cubierto en la capital, con los cabestros liderando la manada en el primer tramo de la cuesta de Santo Domingo. En contra de lo que es habitual en todos los encierros, los propios mansos guiaron en cabeza a los seis toros hasta la curva de Mercaderes.

Durante el inicio de la carrera, los toros se resguardaron en el centro de la manada y dos morlacos negros apenas cabeceaban a derecha e izquierda durante la cuesta de Santo Domingo provocando pequeños momentos de tensión entre los mozos que se encontraban a los dos lados de la calle.

Una vez enfilaron Estafeta, dos toros negros tomaron la cabeza de la manada y fue a partir de este momento cuando se pudieron ver las carreras más bonitas de los mozos. Un toro quedó suelto del resto de la manada, pero seguía también un buen ritmo y no provocó peligro para los mozos.

Con muchos menos corredores de lo habitual en este tramo, era más fácil situarse delante de los astados, aunque fue éste el lugar en el que se registraron más caídas, especialmente en el tramo de Telefónica, donde varios mozos cayeron al suelo por el fuerte ritmo que seguían los de Alcurrucén.

Los toros pisaron la arena del coso taurino a los dos minutos de haber iniciado la carrera pero, en lugar de llegar directamente a los chiqueros, tres toros negros y uno colorado se dirigieron hacia la derecha de la plaza, aunque no embistieron a las decenas de mozos que se encontraban en esa zona y, rodeando la plaza, entraron en los corrales.

El encierro de las fiestas de San Fermín ocasionó tres heridos atendidos por los servicios de urgencia hospitalaria del Servicio Navarro de Salud. Ninguno de ellos lo fue por asta de toro. El pamplonés J.U.P., de 32 años, accidentado en el tramo de Estafeta, quedó ingresado en el Servicio de Traumatología Hospital Virgen del Camino con contusión de cadera de pronóstico grave.

El segundo herido de hoy es José María Echeverría Echeverría, de 55 años, natural de Pamplona, que fue atendido de policontusiones en el Servicio de Urgencias del Hospital de Navarra, sin ingreso en centro hospitalario.

Un tercer herido, el estadounidense James Stoltz, fue atendido de una fractura de escápula (hombro) en el Hospital Virgen del Camino a donde llegó procedente de la enfermería de la plaza de toros. El accidente tuvo lugar en el festejo de vaquillas posterior al encierro y el paciente no fue ingresado.

GALLICO DE ORO También hoy martes, el dibujante y humorista César Oroz Martija recibió hoy el 21º Gallico de Oro otorgado por la Sociedad Gastronómica Napardi y recordó con este galardón, en tono humorístico, "a los caídos, a todos aquellos a los que las circunstancias, la vida y el estómago hicieron pasar del tendido de sol al tendido de sombra". "Descansen en paz", dijo.

Oroz mostró su agradecimiento y emoción al recibir el premio en la sede de Napardi, en la céntrica calle de Jarauta, ante sus familiares, amigos y compañeros de trabajo en 'Diario de Navarra', y recordó que, considerándose a sí mismo "un enfermo de los Sanfermines, este galardón está señalado" para los pamploneses.

En sus palabras tras recibir el Gallico de Oro, Oroz tuvo un recuerdo especial "para los que cuentan el calendario según los días de la escalera, para aquellos que en cualquier rincón del mundo buscan una antena parabólica para ver el encierro por televisión, para los que cantan 'Esa, esa, La Pamplonesa', porque han sobrevivido a una noche llena de peligros, para los que piensan que el día más triste es el 15 de julio". Además, pidió a Dios que perdone "a los que se han ido a Salou" durante las fiestas de San Fermín.

César Oroz nació en 1968 en Pamplona, está casado y es padre de tres hijos. Es diplomado en Ciencias Empresariales en 1990 y realiza la tira cómica de 'Diario de Navarra' en la última página del periódico. Obtuvo el Premio Mingote en el año 2004.

El Gallico de Oro reconoce a aquella persona de Pamplona o vinculada a ella que "por su trabajo o dedicación haya destacado de manera sobresaliente en el campo de las artes, las ciencias, el deporte, la cultura o las humanidades".