BERLÍN, 13 Mar. (Reuters/EP) -
El beneficio de Volkswagen podría quedar en pausa este año porque la mayor automotriz de Europa, que tiene como meta ser la mayor del mundo, decidió invertir en la modernización de su tecnología.
VW busca este año igualar el beneficio operativo récord de 2011, que fue de 11.300 millones de euros, antes de intentar que vuelvan a subir en 2013, dijo la compañía en su informe anual publicado el lunes.
Los ingresos podrían superar en 2012 y 2013 la cifra del año pasado, que fue de 159.300 millones de euros. "Necesitamos recuperar nuestro desarrollo sustancial y reiniciar los costes," dijo el presidente ejecutivo, Martin Winterkorn.
Los esfuerzos para expandir el uso compartido de partes en todo el rango de automóviles pequeños y medianos de VW podrían generar "ahorros sustanciales" en el largo plazo, afirmó.
VW estima que su nueva arquitectura para compartir piezas en todas las marcas, incluyendo la división de coches de lujo Audi y la unidad checa Skoda, podría reducir los costes de producción en alrededor de un 20 por ciento. Además, los tiempos de ensamblaje podrían reducirse en un 30 por ciento.
La nueva tecnología es una palanca para impulsar la rentabilidad de VW, ya que la compañía busca convertirse en el mayor fabricante de vehículos para 2018.
El crecimiento sostenido de los mercados automotrices en Asia, Estados Unidos, América Latina y Rusia podría ayudar este año a VW a incrementar nuevamente las entregas del grupo, que sumaron en 2011 el récord de 8,3 millones de unidades.
La compañía estudia presentar más de 40 nuevos modelos o modernizados este año, según Winterkorn. "Seguimos en camino para llegar a la cima de la industria automotriz," dijo Winterkorn.
