MADRID, 14 Abr. (Portaltic/EP) -
Los juegos sociales se están consolidando en España, donde cada vez hay más usuarios. Este crecimiento está haciendo que este tipo de contenidos se convierta en un negocio y aumenta la aparición de empresas que aprovechan las posibilidades de los juegos en redes sociales. Playspace es una de estas compañías, con un aire muy español.
Las redes sociales han revolucionado la forma de comunicación de los usuarios, pero su impacto va mucho más allá de la función comunicativa. Este tipo de servicios ha abierto nuevas vías de negocio, de promoción. El desarrollo de servicios sociales está reportando grandes beneficios para las compañías que saben establecerse en este medio. Los juegos sociales son un tipo de contenido de este tipo que se está convirtiendo en todo un referente.
Los datos avalan el uso de redes sociales y de juegos en las mismas. En el caso concreto de España, el 77 por ciento de los internautas confirma que usa redes sociales. Se trata de un número importante, como lo es que el 31 por ciento de esas personas use juegos sociales online. El uso de redes sociales como plataforma de juegos ya cuenta con un volumen importante de usuarios y todo hace indicar que hay mucho margen de crecimiento.
Visto el interés de los usuarios, cada vez hay más empresas que se animan a apostar por este actividad online. De esta forma, las plataformas de juegos sociales son cada vez más numerosas, lo que hace que se amplíe la oferta y con ello el número de usuarios.
Una de las empresas españolas que está apostando por este sector es Playspace. Se trata de una nueva desarrolladora de juegos sociales casuales multijugador que en sus escasos meses de vida ya está consiguiendo una interacción interesante con los usuarios. El caso de Playspace es especialmente interesante porque su apuesta ha sido la de adaptar a Tuenti y Facebook los juegos de mesa tradicionales.
Hasta ahora los juegos de construcción colaborativos han sido los reyes absolutos en el campo social, pero Playspace apuesta por el Parchis, el Dominó, la Oca o el Bingo. Según la compañía, sus juegos, en conjunto, han logrado registrar un total de 1,7 millones de usuarios, con 600.000 usuarios activos mensualmente un 3,3 millones de visitas mensuales.
Los datos de usuarios ya son una muestra del potencial de los juegos sociales y de Playspace, pero lo mejor es que además de entretener a los usuarios se está consiguiendo monetizar la experiencia. Los juegos de Playspace se basan en un modelo de negocio Freemium, en la que hay una parte de pago y otra gratuita. Playspace regala créditos para jugar de forma gratuita, pero una vez consumido ese crédito, para continuar jugando hay que comprar monedas virtuales, que se venden en packs que van de 3 a 60 euros.
Este sistema permite a los usuarios pagar siempre después de haber probado un juego, lo que hace que el disfrute esté garantizado. Los usuarios pagan por algo que ya conocen y saben que les satisface, lo que ayuda a generar ingresos. Según la compañía, solo tres meses después del inicio de la actividad ya se están registrando compras de monedas.
Según los datos de Playspace, la venta de monedas virtuales ha tenido un crecimiento exponencial de un 185 por ciento entre los juegos de Facebook y Tuenti, con una media de 5.000 usuarios concurrentes, 40 pagos diarios y creciendo.
El caso de Playspace es solo un ejemplo de como nuevas compañías se están abriendo un hueco en un sector que presenta interesantes posibilidades y un amplio y vario perfil de consumidores.
