Intel crea un centro de investigación sobre Informática de alto rendimiento

MADRID, 19 Nov. (POrtaltic/EP) -

Intel realizará una inversión multimillonaria en la creación de un centro de investigación sobre informática de alto rendimiento. El centro formará parte de la red de investigación europea de Intel - Intel Labs Europe - y estudiará el desarrollo de unos sistemas informáticos que multiplican por mil la utilidad de los superordenadores más rápidos de hoy día.

El centro recibirá el nombre de Centro de Investigación sobre Informática de Exaescala (Exascale Computing Research Center). El término "exaescala" se refiere a los ordenadores con capacidad para procesar 1 trillón de instrucciones por segundo. Se espera que la llegada de esta capacidad permita a los ordenadores resolver problemas mucho más complejos que los que se plantean en la actualidad.

En cuanto a la inversión económica necesaria para llevar a cabo este proyecto, se estima que serán necesarios varios millones de euros a lo largo de un periodo de tres años. Además, se prevé que emplee a cerca de una docena de personas en un principio, aunque se espera que crezca hasta multiplicar por tres estos puestos de trabajo.

En la iniciativa también colaboran la Comisión de Energía Atómica de Francia, la universidad de Versalles en Saint-Quentin-en-Yvelines y la Agencia Francesa Nacional para Informática de Alto Rendimiento, tratándose así del primer laboratorio compartido de Intel en Europa.

Entre los aspectos que se investigarán en el centro destaca la ampliación de los programas de investigación existentes en Intel sobre esta materia. Además, realizará otro tipo de inversiones e iniciativas, entre las que se incluyen el programa Intel Academic Community y el proyecto "Mapping the Globe from Space" de la Agencia Espacial Europea.

El centro también trabajará en la integración de los sistemas multi petaFLOPS, el desarrollo de técnicas avanzadas para optimización del rendimiento y la colaboración con los usuarios finales para optimizar el rendimiento de los superordenadores en áreas como la energía, la sismología, la dinámica computacional de fluidos y los cuidados sanitarios.