MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
El 91 por ciento de los españoles considera que el Gobierno sólo está preocupado por los intereses de la industria cultural y no atiende los del conjunto de ciudadanos, según una encuesta realizada por FACUA-Consumidores en Acción sobre las medidas del Ejecutivo en el ámbito de su política cultural para regular los derechos de los autores, editores y usuarios.
Así, el estudio revela que el 97 por ciento de los usuarios está en contra del canon digital y el 41 por ciento cree que sólo sería justo si se aplicase a las obras originales y no a soportes de almacenamiento vírgenes. Además, el 56 por ciento opina que es totalmente injusto y no debería aplicarse a ningún tipo de soporte.
En cuanto al mecanismo de cierre de páginas web de enlaces que recoge el anteproyecto de Ley de Economía Sostenible, el 82 por ciento considera que con esta medida se vulnerarían derechos fundamentales, dándose más valor a los derechos de la industria cultural.
El porcentaje de usuarios que se muestra de acuerdo con la medida al opinar que podrá proteger los derechos de los autores y editores que con la normativa actual se encuentran desprotegidos se reduce al 3 por ciento mientras que el 15 por ciento de los encuestados no opina al indicar que no conoce el alcance de la medida.
Por otro lado, el 20 por ciento de los usuarios cree que adquirir copias pirateadas es una inmoralidad. El concepto piratería, eso sí, no es el mismo para todos los usuarios, ya que unos lo asocian a la compra de copias ilegales y otros al intercambio o descarga de obras sin ánimo de lucro, asimilando el discurso de la industria y el Gobierno.
La existencia de consecuencias legales sólo frenaría la compra de copias piratas o el intercambio de archivos para el 31 por ciento de los encuestados y el 49 por ciento no dejaría de hacerlo. En este sentido, un precio asequible movería al 67 por ciento a comprar una obra original antes que una copia y la existencia de una mejor calidad en la versión original también llevaría a comprarla al 60 por ciento de los encuestados.
